Los veranos en Marivent eran apacibles para los Borbones. Todo esto ha cambiado mucho en los últimos años. Este agosto, el foco no está solo en los jardines o en los invitados. En primer lugar, se ha hablado mucho sobre la vida separada de los Reyes de España. Desde el escándalo de Jaime del Burgo - presunto amante de Letizia Ortiz - los rumores se han sucedido.
Por otra parte, la Reina Sofía tan solo ha estado dos días en Marivent. Vino por compromiso institucional, pero rápidamente se fue para estar al lado de su hermana Irene. Su salud cada día es más frágil y no la quiere dejar sola.
Y finalmente, el interés gira en torno a Leonor de Borbón y a su hermana Sofía. Las discusiones con su madre, sus salidas nocturnas, la vestimenta impuesta por Letizia y ahora el motivo por el que no se ha visto a Leonor al volante.

La heredera debutó por primera vez como anfitriona, junto a su hermana Sofía, en la recepción veraniega de Palma. Un paso más en su perfil institucional y un mensaje claro: las dos ya forman parte del escaparate balear de la Corona. La cita reunió a unas seiscientas personas y certificó el cierre formal de los actos en la isla.
Del estreno al volante a la incógnita: lo que se ha visto y lo que se dice
El verano pasado ya sorprendió ver a Leonor conduciendo por el centro de Palma tras una tarde de compras con Letizia, doña Sofía y su hermana. Fue su primera vez al volante en público, con imágenes nítidas que mostraban seguridad y naturalidad. Ese día quedó como un símbolo de normalidad juvenil en medio del protocolo.
Doce meses después, el relato se ha enredado. El Nacional ha publicado que la Princesa habría desarrollado miedo a conducir y que evita ponerse al mando del coche. No hay parte oficial ni constancia de un incidente que lo explique.

Al mismo tiempo, una revista especializada en motor sitúa estos días a Leonor conduciendo por los alrededores de Marivent un Cupra Formentor, el mismo modelo que suele utilizar el Rey en desplazamientos privados. La versión, en sentido contrario al rumor, alimenta el desconcierto y refuerza la idea de que la decisión de conducir —o no— forma parte de su esfera privada. El primer coche de Felipe VI fue un Seat Ibiza, muy popular en la época.
Cómo gestiona Zarzuela los desplazamientos y qué encaja con el perfil de Leonor
La Jefatura del Estado dispone de una flota de 44 vehículos asignados por el Parque Móvil, que incluye turismos blindados, furgonetas y unidades de apoyo. Es el andamiaje logístico que garantiza seguridad y discreción. Pero en Mallorca es habitual ver a los miembros de la familia utilizar coches de serie, fabricados en España, y moverse con cierta autonomía.
Esa mezcla de protocolo y normalidad explica que un día veamos escoltas y, al siguiente, a un miembro de la familia real al volante.