La reina Letizia ha inaugurado su agenda estival en Palma de Mallorca con una salida que no ha dejado indiferente a nadie. Acompañada de sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, ha reaparecido públicamente en un acto cultural, disipando cualquier atisbo de rumor sobre su estado anímico.
Sin embargo, más allá de la película, el verdadero foco mediático se posó sobre el anfitrión que la recibió: el polifacético José Corbacho. Un encuentro que ha desatado un sinfín de análisis y que revela mucho más de lo que parece a simple vista.
Un encuentro inesperado en el Atlàntida Mallorca Film Fest
La noche del jueves, el centro de Palma se convirtió en el escenario de la primera aparición pública de la Reina y sus hijas. El motivo era la proyección del largometraje documental "En un lugar de la mente", una pieza que aborda la salud mental a través de una adaptación del Quijote, enmarcada en la quinta edición del Atlàntida Mallorca Film Fest.
Poco antes de las nueve de la noche, Letizia, junto a Leonor y Sofía, llegaba a los cines Rívoli. Allí, para sorpresa de muchos, eran recibidas por el actor y director José Corbacho y la actriz Catalina Solivellas. Algunas fuentes indican que el acto fue un 'castigo' de la reina a sus hijas por las recientes salidas nocturnas. Sonada fue la de Magaluf.
La elección del documental no es casual. La Reina ha hecho de la salud mental una de las banderas de su agenda institucional. La película, dirigida por Pep Bonet y protagonizada por actores amateurs con diagnósticos de salud mental, representa un apoyo explícito a la visibilización de estas realidades.
Pero la presencia de Corbacho como maestro de ceremonias añade una capa de complejidad al evento. En medio de los persistentes rumores que relacionan sentimentalmente a la Reina con el cineasta Rodrigo Cortés, su gesto de apoyar a otro director, en este caso catalán, podría interpretarse como una declaración de intenciones.
José Corbacho, más allá del humor: sus polémicas declaraciones
Para entender la magnitud de este encuentro, es crucial saber quién es José Corbacho. Nacido en L'Hospitalet de Llobregat, el actor y humorista es una figura de sobra conocida en el panorama catalán y español, socio de la productora El Terrat y rostro de programas como 'Homo Zapping'.
Sin embargo, su perfil va más allá del entretenimiento. Corbacho no ha dudado en posicionarse en temas espinosos, generando titulares que todavía resuenan.
La polémica más sonada fue a raíz de una entrevista en el diario El Mundo, donde afirmó: "La ciudad perfecta para mí sería Barcelona, pero con la gente de Madrid". Estas palabras, que muchos interpretaron como un desdén hacia sus conciudadanos barceloneses, se produjeron en un momento de alta tensión por el procés.
Corbacho matizó después que el titular no era suyo, pero sus declaraciones sobre las protestas y su impacto en la ciudad ("salir a la calle y que haya hogueras sin ser San Juan... hostia, no anima a que venga gente") dejaron clara su postura. Este perfil, crítico con ciertos aspectos del nacionalismo catalán, encaja en una línea que Zarzuela parece favorecer.
La estrategia de Zarzuela: ¿una elección casual?
La Casa Real no da puntada sin hilo. La elección de las personalidades que acompañan a los miembros de la Familia Real en actos públicos es siempre un gesto medido. Así como para los Premios Princesa de Girona se ha optado por presentadoras como Agnès Marquès, de perfil catalanista, pero moderado, la elección de Corbacho para este evento en Palma parece seguir una lógica similar: figuras catalanas que no se alinean con el independentismo.