Noruega despierta con una noticia que remueve los cimientos de la Familia Real. Marius Borg, el hijo de la princesa heredera Mette-Marit, ha perdido uno de los mayores privilegios que le había otorgado su padrastro, el príncipe Haakon.
Se trata de su pasaporte diplomático, un documento que lo situaba en una categoría especial y le permitía viajar con prerrogativas reservadas únicamente a los representantes del Estado. Ahora, sin ese privilegio, Marius Borg no puede salir del país.

Marius Borg creció rodeado de los lujos y el afecto de la realeza noruega, aunque siempre se dejó muy claro que no formaba parte activa de la institución. Como fruto de una relación anterior de Mette-Marit, fue acogido con naturalidad en la familia real.
Haakon lo asumió como un hijo propio, los reyes Harald y Sonia lo trataron como un nieto más, y su presencia en actos familiares era habitual durante su feliz infancia. No tenía título ni obligaciones oficiales, pero su vida transcurría entre privilegios silenciosos.
Marius Borg y el príncipe Haakon de Noruega se han ido de viaje juntos
Todo cambió de manera drástica el 4 de agosto de 2024, cuando fue detenido tras ser acusado de agredir física y psicológicamente a su entonces pareja en Frogner. La detención destapó un sinfín de denuncias acumuladas y un proceso judicial que terminaría con la imputación de 23 delitos. El velo de discreción que había protegido a Marius durante años cayó estrepitosamente, y el escándalo se convirtió en una pesadilla para la monarquía.

Pese a ello, la actitud de la familia real ha sido ambigua. Marius ha continuado entrando y saliendo del país, incluso para disfrutar de vacaciones en Italia, Francia y Portugal. Precisamente en este último país fue visto en julio de 2025 practicando surf junto al príncipe Haakon y su medio hermano, el príncipe Sverre Magnus.
Marius Borg llegó a Noruega escoltado por la seguridad del príncipe Haakon
Al regresar, el trío fue escoltado desde el aeropuerto hasta la residencia real de Skaugum, utilizando el protocolo de seguridad reservado solo para los miembros de la realeza. Se supo entonces que Marius utilizaba pasaporte diplomático, un privilegio que solo debía usarse en viajes oficiales con la familia real.

Sin embargo, según reveló la revista Se og Hør, el Ministerio de Asuntos Exteriores revocó ese pasaporte diplomático a comienzos de 2025. Aunque no se ha confirmado que la decisión esté relacionada con los escándalos judiciales del joven, todo apunta a que ha sido un factor determinante.
El gesto marca un antes y un después: Marius Borg ha perdido finalmente el símbolo de confianza que Haakon le confió hace años. Y con ello, el vínculo institucional que aún lo unía, aunque tenuemente, a la Corona de Noruega.