Los seguidores de Pasapalabra han contenido el aliento tras la última hora sobre Manu Pascual y Rosa Rodríguez, protagonistas indiscutibles del concurso. La tensión se ha apoderado del plató en una tarde especial que ha dejado al público con un sabor de boca inolvidable.
El duelo volvió a demostrar por qué Rosa y Manu son fijos en el programa y referentes en la televisión. Sin embargo, la pregunta que todos se hacen es inevitable: ¿qué ha ocurrido realmente en este enfrentamiento tan esperado?

Manu y Rosa dejan a todos sin aliento con un duelo especial en El Rosco de Pasapalabra
Desde hace meses, Manu y Rosa mantienen un pulso constante en El Rosco. Los dos han protagonizado duelos épicos que han quedado grabados en la memoria de los espectadores. Cada jornada se convierte en un reto personal, donde la estrategia y los nervios juegan un papel tan importante como el conocimiento.
El bote ha superado ya los 2.008.000 euros, lo que convierte cada enfrentamiento en un capítulo decisivo. Ninguno de los concursantes parece dispuesto a ceder terreno. Su regularidad, su templanza y la conexión que generan con el público los han convertido en parte esencial del programa.
El gran momento llegó cuando Manu y Rosa se enfrentaron de nuevo en El Rosco. Desde la primera palabra, ambos mostraron una concentración férrea y un ritmo vertiginoso que anticipaba un desenlace de infarto. Cada acierto era celebrado con entusiasmo por los seguidores, conscientes de que se estaba viviendo un duelo histórico.
Rosa fue la primera en dar un paso decisivo. Con 23 aciertos y varios segundos de ventaja, optó por detenerse y dejar correr el reloj. No quiso arriesgar con las últimas letras y decidió poner toda la presión sobre los hombros de Manu.

Le llegó entonces el turno a Manu que, lejos de perder la calma, afrontó la situación con su habitual serenidad. Sumó cuatro respuestas más y alcanzó a Rosa, dejando el marcador igualado. Con dos letras en duda y el cronómetro en marcha, prefirió parar y asegurar el empate.
El bote de Pasapalabra sigue creciendo y aumenta la presión
Lo ocurrido en esta jornada vuelve a confirmar que Manu y Rosa son mucho más que concursantes. Son la esencia del concurso, dos figuras que han elevado Pasapalabra a otra dimensión.
Ambos demostraron que no están dispuestos a precipitarse. Prefieren asegurar el empate antes que arriesgarse a un error que pueda costarles la continuidad. Este empate no solo mantiene a Manu y Rosa en la competición, sino que alimenta la expectación para el próximo programa, ya que ninguno tendrá que pasar por la silla azul.

El último duelo de Pasapalabra ha vuelto a demostrar la grandeza de Manu y Rosa. Con el bote en 2.008.000 euros y un empate que mantiene la tensión, ambos siguen escribiendo capítulos inolvidables del concurso. La pregunta ahora es clara: ¿hasta dónde podrán llegar en esta emocionante batalla que parece no tener fin?