Una mujer y un hombre sonríen juntos con un pastel de cumpleaños ilustrado al frente

Evan Funke, el chef que ha dado de comer a Meghan Markle en su 44 cumpleaños

La duquesa de Sussex eligió uno de los restaurantes más exclusivos de Beverly Hills, toda la verdad

La duquesa de Sussex sopló las velas de su 44 cumpleaños sin alfombra roja ni flashes invasivos. Fue una velada pensada para disfrutar, rodeada de su círculo y con un escenario que muchos foodies describen como un auténtico “templo de la pasta”. Nada de estridencias: ambiente cálido, ritmo pausado y una terraza en altura que invitaba a estirar la noche.

Meghan compartió una imagen íntima en su perfil de Instagram. En el texto daba las gracias  por unas “24 horas hermosas”. La instantánea se viralizó en cuestión de minutos y confirmó lo esencial: fue una celebración pequeña, elegante y muy personal.

Una cena íntima, sabor italiano y terraza con vistas que conquistan a Hollywood

El lugar elegido es uno de esos espacios que Los Ángeles ha elevado a categoría de plan imprescindible. Tres plantas, un laboratorio de pasta a la vista y un rooftop pensado para el ritual del cóctel al atardecer. En la barra de la azotea, hecha en cuarzo rosa, los bartenders reinterpretan clásicos italianos mientras el skyline de Beverly Hills se despliega a lo lejos.

Mujer sonriente con blusa clara y un dibujo de un frasco de crema resaltado en rojo a su lado
La duquesa de Sussex sabe como celebrar un buen aniversario | XCatalunya, Linear_design Images, People.com

Ahí es donde entran los nombres propios: el restaurante Funke, del chef Evan Funke. Responsable absoluto de la pasta artesanal en la costa oeste y responsable también de éxitos como Felix y Mother Wolf. Nacido en Santa Mónica, se formó en Italia aprendiendo técnicas centenarias de elaboración de pasta que hoy defiende como un patrimonio que debe preservarse.

Su destreza le ha valido dos nominaciones al prestigioso premio James Beard —considerado el “Óscar” de la cocina— y un papel protagonista en la serie de Netflix Chef’s Table: Noodles. Funke es conocido como “el apóstol de la pasta” por su obsesión por la perfección en cada plato y su compromiso con la tradición, pero también por saber adaptarla al paladar cosmopolita de Los Ángeles. Su restaurante en Beverly Hills es una carta de amor a Italia, combinando el rigor de las recetas auténticas con una presentación que enamora a la clientela más exigente de Hollywood.

Una mujer y un hombre vestidos de manera elegante sonríen mientras caminan juntos, la mujer saluda con la mano
Harry también estaba en el cumpleaños de Meghan | XCatalunya, redes

Qué se sirvió en la mesa y por qué la elección no sorprende

No trascendió el detalle de los platos, pero la cocina de Funke marca el guion. La carta viaja de Sicilia a Roma con focaccia “sfincione”, flores de calabacín con ricotta y lubina a la brasa. El fuerte, claro, es la pasta: cacio e pepe en tonnarelli, tagliatelle a la boloñesa, o pappardelle con ragú de pato, que justifican la fama del local. Es una cocina pensada para compartir, armonizada con una bodega que favorece blancos italianos minerales y tintos moldeados por el Mediterráneo.

Para una celebración de aniversario, tiene sentido ese equilibrio entre confort y sofisticación. Comida reconocible, técnica impecable y porciones que permiten una sobremesa larga sin que la conversación se corte.

Lo que contó Meghan y cómo reaccionó su entorno digital

El único testimonio oficial fue el de ella misma. En su publicación agradeció la compañía y subrayó la calidad de la experiencia gastronómica sin convertir el momento en una campaña. Ese detalle encaja con su estrategia reciente: alternar el foco de su marca personal con instantes puntuales de vida privada. La reacción fue inmediata y amable: miles de mensajes celebraron verla “feliz y luminosa”, y destacaron la naturalidad de un cumpleaños sin artificio.

Tampoco hubo posado de pareja ni mesa exhibida plato a plato. Fue un retrato en clave íntima, suficiente para saciar la curiosidad sin caer en el exhibicionismo que tanto castiga a algunas celebridades. Aquí no hubo romance de manual ni ruptura silenciosa escondida entre líneas: solo una cena bonita y bien elegida.