En la vida de Harry, hay quienes prefieren el silencio y la discreción hasta que algo realmente importante las invita a hablar. Cressida Bonas es una de ellas. Su estilo elegante y reservado la ha mantenido al margen de los focos, pero siempre que reaparece, lo hace dejando huella.
Conocida por su pasado vínculo con el príncipe Harry, ha construido una vida propia lejos de la presión mediática. Hoy, su voz vuelve a escucharse con un tono más íntimo, sincero y lleno de matices. Una confesión que deja entrever su presente y sus prioridades.

La exnovia de Harry: rompiendo mitos con honestidad
En una reciente entrevista, Cressida confesó que su idea inicial de la maternidad era de cuento. “Me imaginaba a una mujer sentada bajo un árbol con un bebé tranquilo, radiante, pero no es así, ¿verdad?”. La realidad reconoce, es mucho más caótica: “Tienes vómito en la blusa, en el pelo, y tu hijo está llorando”.
Su visión ha cambiado gracias a las conversaciones que mantiene en su pódcast Lessons From Our Mothers, que conduce junto a su hermanastra Isabella Branson. Allí escuchan testimonios de celebridades británicas y madres anónimas. “El amor que siento por mi hijo es un amor que ni siquiera podría describir… a veces muy visceral, pero también muy desafiante”, relató.
Un nombre que guarda un homenaje
En junio dio la bienvenida a su hija, Delphina Pandora. El segundo nombre es un tributo a su hermana Pandora Cooper-Key, fallecida de cáncer en 2024. La elección encierra un recuerdo profundo y un gesto de amor que trasciende generaciones.
En ese momento difícil, Cressida encontró en la crianza una lección inesperada: “No tuve más remedio que estar presente con mi hijo en lugar de estar en ese momento de dolor. Me di cuenta de que lo único que los niños realmente quieren de ti no es que seas perfecto, sino que estés (…) con ellos en el momento”.

Más allá del príncipe Harry y de la realeza
Cressida, quien fue pareja del príncipe Harry entre 2012 y 2014, se casó en 2020 con Harry Wentworth-Stanley. Con él comparte también a su hijo mayor, Wilber James. Aunque su vida estuvo ligada a la realeza británica, su mensaje actual se aleja de títulos y protocolos.
Su testimonio se suma al de otras mujeres que, como Meghan Markle, han hablado sin filtros sobre las luces y sombras de ser madre. En cada palabra, Cressida recuerda que la perfección no es el objetivo. Lo que importa es la conexión real con los hijos, incluso en medio del caos.