Hombre de cabello canoso sonriendo y señalando hacia el frente con un fondo de cocina y un emoji de carita babeando en primer plano

Aprovecha los últimos días de verano con la receta de cerezas de Nandu Jubany

El chef catalán enciende Instagram con un postre de temporada que combina cerezas, brioche y un guiño anisado perfecto para casa

El verano apura sus horas y la mesa pide alegrías sencillas, frescas y memorables para despedir la estación con estilo propio. Nandu Jubany, siempre atento al pulso del producto, ha encontrado en las cerezas el broche goloso para cerrar la temporada con una sonrisa. 

Hablamos de un cocinero con estrella Michelin y biografía de personaje mediático, que en Catalunya trasciende la cocina para convertirse en fenómeno cultural.  Su casa madre, Can Jubany, mantiene la excelencia en una masía donde tradición y vanguardia conviven con naturalidad. 

La receta de cerezas que prende en Instagram: brioche crujiente, gelatina de anís y helado cremoso

En un vídeo reciente de Instagram, el chef presenta una receta de cerezas pensada para los últimos coletazos del estío, directa, luminosa y muy doméstica. El clip muestra el deshuesado de piezas grandes, casi picotas, y un montaje final que entra por los ojos y exige cuchara inmediata.

Un hombre de cabello canoso y barba corta, vestido con una chaqueta blanca, está comiendo algo mientras cierra un ojo, con un fondo de árboles verdes.
Nandu Jubany en instagram probando un bocado | @nandujubany_oficial

Jubany arranca con brioche casero cortado en dados, que pasa por un almíbar TPT y se lleva al horno hasta quedar crujiente y brillante.TPT significa “tanto por tanto”, es decir, un almíbar a partes iguales de agua y azúcar, perfecto para caramelizar sin complicaciones.

El segundo gesto es una gelatina anisada elaborada con agua caliente y Anís Chinchón, un destilado con indicación geográfica que aporta aroma limpio y final especiado muy reconocible. El resultado se enfría en un táper, se corta en dados y se reparte por el plato con discreción calculada. 

Sobre la base de cerezas y brioche caen las láminas de gelatina, una bola de helado de nata, o, si se prefiere, una cucharada de mascarpone. Luego, un toque de ralladura de lima y hojas de menta para despertar el conjunto. La escena es Jubany en esencia: técnica clara, producto protagonista y un remate fresco que pide repetición. 

El calendario manda: últimas cerezas y por qué esta idea llega a tiempo

La temporada de cerezas en España se mueve oficialmente entre mayo y agosto.  Este año, como suele ocurrir, la ventana ha sido intensa y relativamente corta, lo que explica el apremio por disfrutarlas antes de que desaparezcan. 

Además, la meteorología reciente ha comprimido calendarios y encarecido el fruto en algunos mercados, dejando semanas muy buenas y otras más escasas. El mensaje de Jubany encaja en ese contexto estacional: si encuentras cerezas firmes y dulces, aprovéchalas ahora porque su mejor momento se esfuma rápido. 

Reacciones y perfil celebrity: del fogón al ‘trending’, con Dakar y Messi en el horizonte

La publicación ha circulado con soltura en su Instagram, una comunidad multitudinaria donde el chef comparte recetas, directos y momentos de servicio con la naturalidad que le caracteriza. No extraña que un postre tan reproducible haya generado comentarios entusiastas, porque reúne sencillez televisiva y sabor reconocible.

Un chef con delantal azul oscuro y camisa blanca está apoyado en una barra de cocina, mientras otro cocinero trabaja en el fondo.
Nandu Jubany en su propia cocina de un restaurante | ACN

Jubany juega, además, en liga de celebridad.  Ha competido en el Dakar, ha sido elegido para cocinar en momentos de alta visibilidad y colabora en proyectos vinculados a Leo Messi. Ese altavoz amplifica cualquier guiño de cosecha propia, como este adiós dulce al verano. 

La cocina mediática también lo reclama para grandes celebraciones, con elecciones sonadas que refuerzan su aura pública entre gastronomía y espectáculo. Su nombre aparece cuando alguien busca solvencia, narrativa y un toque de emoción en la mesa de los días señalados.