La rivalidad entre Osasuna y Athletic vuelve a escena por la vía de los despachos. Las relaciones llevan años tensionadas desde que se rompieran tras captaciones en Tajonar. Este verano añadió un capítulo extra con la salida del lateral Jesús Areso, y que los navarros pelearon hasta el final.
El plan de Lisci: defensa de tres y liderazgo para un vestuario joven
Alessio Lisci, nombrado en junio, quiere una línea de tres centrales con experiencia a ambos perfiles, ideal para acelerar la adaptación de un grupo con mucho canterano.
Esa hoja de ruta coincide con la coyuntura del Athletic, que encara el inicio liguero con contratiempos en defensa. Yeray Álvarez está suspendido de forma provisional por un positivo y Unai Egiluz acaba de pasar por el quirófano por una rotura del cruzado. La opción de recuperar a un líder veterano gana fuerza en ese contexto, mientras en Bilbao ultiman el regreso de Aymeric Laporte.

El objetivo tiene nombre y encaja en la zaga de tres de Lisci
La diana rojilla es un campeón europeo de Pamplona, libre desde julio tras cerrar etapa en el Metropolitano. El club ya ha establecido contactos para su llegada y la operación no requeriría traspaso, una ventaja crucial en el límite salarial. La carrera no es en solitario: en Bilbao estudian la posibilidad y siguen atentos a su situación para sumar fondo de armario a la zaga. ¿Se atreverá Osasuna a cerrarlo pese a la puja del Athletic?
César Azpilicueta, libre desde el 1 de julio y con números vigentes
El futbolista es César Azpilicueta, navarro, polivalente y con jerarquía. Finalizó contrato el 30 de junio y busca proyecto para su último gran reto. Según informó @MatteMoretto en X, Osasuna ha iniciado contactos para su retorno. El interés del Athletic está encima de la mesa desde mediados de julio.
En la 2024/25 disputó 20 partidos y casi 1.200 minutos con el Atlético, lo que demuestra que llega con ritmo competitivo. Además, su valor estimado a fecha de junio era de 1,5 millones.

La pugna con el Athletic: contexto, necesidades y mensaje a la afición
El conjunto bilbaíno ha sufrido una secuencia de golpes atrás en plena pretemporada y valora sumar veteranía mientras cierra la operación Laporte. La salida de Areso desde Pamplona, además, reavivó el malestar en Navarra y explica la carga simbólica que tendría el retorno del capitán que se marchó a Francia hace quince años.
En El Sadar lo interpretan como triple premio: refuerzo inmediato para el sistema de Lisci, impacto emocional en la grada y un gesto de fuerza en un tablero históricamente dominado por Lezama. La decisión final dependerá de encajar salario, rol y calendario, pero el encaje futbolístico es claro. Azpilicueta aporta lectura táctica, salida limpia y una fiabilidad que sostiene partidos cerrados.