El mediodía en Las Rozas siempre tiene un murmullo particular, mezcla de ilusión y cámaras inquietas. Entre selfies, firmas y camisetas, Pau Cubarsí avanza con esa calma que ya le distingue. El central saluda, escucha peticiones y sonríe antes de perderse camino del vestuario. Lo que sucede después queda en la retina de los presentes y en el hilo narrativo de la jornada.
El Barça aterriza en el parón con siete de nueve puntos, todos a domicilio y sin apenas margen. Ganó en Mallorca con autoridad y remontó en el Ciutat de València antes del empate trabajado en Vallecas. Hansi Flick ha gestionado esfuerzos en una defensa con jerarquías ajustadas y juventud protagonista. El contexto permite que Cubarsí llegue competitivo, con ritmo y sin sobrecargas a la concentración.
Luis de la Fuente mira a septiembre con dos salidas incómodas y una lista amplia que premia estados de forma. España visita a Bulgaria el jueves y a Turquía el domingo, con la clasificación al Mundial 2026 en juego desde el primer día. Cubarsí entra en un grupo con perfiles complementarios y minutos abiertos en el eje. El seleccionador valora su salida limpia, su lectura temprana y su fiabilidad bajo presión.

El cromo que provocó la carcajada de Cubarsí
La escena surge en la valla de firmas, cuando un joven le tiende un cromo con entusiasmo. El central lo mira y descubre que la foto no es suya, sino de Fermín López. La sorpresa da paso a una risa sincera y a un guiño cómplice antes de estampar la firma. Minutos después, el fan encuentra el cromo correcto y se lleva el doble recuerdo de la anécdota.
La reacción de Pau Cubarsí se ha esparcido por las redes con facilidad. Es una persona muy querida entre el fanatismo culé y muy respetada por todos los clubes. Pau le preguntó al fan con una sonrisa "¿de Fermín?", y el fan le contesto rápidamente y de forma tímida "ay no".
Debut con la absoluta y rol que crece
Cubarsí debutó con la selección española en marzo de 2024, ante Colombia en Londres, rompiendo registros de precocidad defensiva. Aquella noche confirmó que su serenidad no entiende de edad ni de escenarios. Desde entonces, ha consolidado su condición de defensa de élite en Barcelona y con la Roja. Su pase vertical rompe líneas y su timing al anticipo reduce metros en el primer control rival.
Bulgaria y Turquía: dos exámenes para su perfil
En Sofía, España necesitará acelerar la circulación y protegerse de transiciones frontales. El pase interior de Cubarsí hacia el mediapunta puede fijar marcas y liberar a los extremos. En Konya, el reto añade duelos aéreos y lectura de centros laterales ante puntas móviles. Su coordinación con el lateral de lado fuerte será clave para cerrar segundo palo sin desordenar bloques.

La hoja de ruta del central mira también al regreso liguero y a un calendario con exigencias crecientes. En el Barça, su química con Araújo y la salud de Christensen condicionarán alineaciones inmediatas. En la selección, competir con Le Normand, Vivian y Huijsen elevará su umbral de concentración. Si sostiene la fiabilidad mostrada, su minuto competitivo en septiembre será inevitable por pura lógica.

