Paula, conocida en redes como @supercursi, se ha hecho tristemente célebre por sus recurrentes ataques contra Catalunya y su cultura. En los últimos días, ha vuelto a incendiar X (Twitter) con una publicación donde se burla directamente de la Diada Nacional de Catalunya, la fiesta más significativa del pueblo catalán.
"Festejan como su fiesta más grande una cosa que se llama la Diada, recordando cómo se retiraron de una batalla. ¡Ni siquiera perdieron, se retiraron!", ha escrito, cargando con desprecio e ignorancia contra una fecha histórica profundamente sentida.
Los antecedentes: insultos y desinformación
Hace solo unos días, ya protagonizó un agrio episodio con tuits donde despreció el idioma catalán, el movimiento independentista y hasta se mofó de expresiones comunes de la lengua. Sus palabras generaron una oleada de respuestas, muchas de ellas intentando explicar con argumentos la riqueza de la historia catalana.

Uno de los hilos más destacados fue el del historiador J. Lluís Arbós, quien desmontó una por una sus afirmaciones: recordó que el himno argentino fue compuesto por un catalán, Blai Parera i Moret, y que su estructura musical es, irónicamente, la de una sardana, la danza nacional catalana.
También le explicó que muchos términos cotidianos en Argentina, como “flassada” o “pam i pipa”, provienen del catalán, por influencia directa de la inmigración. Y que incluso el barrio de Montserrat en Buenos Aires se llama así en honor a la patrona de Catalunya. Fue una respuesta serena, contundente y documentada.

Una estrategia para ganar seguidores
Pese a la evidencia histórica, Paula ha decidido continuar con su campaña de burla. Lo que inicialmente parecía un exabrupto aislado, se ha convertido en una estrategia sostenida de provocación. Aprovechando el algoritmo de las redes, lanza ataques que sabe que serán virales, generando reacciones, discusiones y visualizaciones.
Algunos usuarios le han respondido diciendo que no representa la diversidad ni el respeto por la historia que caracterizan a gran parte de la sociedad argentina. La han acusado de hacer el ridículo y de utilizar la catalanofobia como moneda de cambio para llamar la atención.
La Diada, una conmemoración de resistencia
La burla sobre la Diada ha sido el colmo para muchos. Lo que Paula ignora —o finge ignorar— es que la Diada del 11 de septiembre no celebra una “retirada” ni mucho menos una “derrota orgullosa”. Es una jornada de memoria y dignidad, que recuerda la caída de Barcelona en 1714 durante la Guerra de Sucesión Española.
Celebrar la Diada no es un gesto de mediocridad, como dice Paula, sino de memoria histórica y compromiso con la libertad. En todo caso, no se celebra perder, sino haber resistido con dignidad hasta el final, y no haber olvidado, más de tres siglos después, aquella lucha por mantener instituciones propias, lengua y autogobierno.
Entre la ignorancia y la provocación
Insulta, provoca, simplifica y tergiversa. Pero frente a la mentira y la ignorancia, la historia, los datos y la cultura siempre acaban imponiéndose. Y la Diada seguirá siendo, con Paula o sin ella, una de las expresiones más vivas del espíritu de un pueblo que no olvida, y que, a diferencia de lo que ella sugiere, no se rinde jamás.