Mujer de cabello oscuro y liso con vestido blanco y aretes largos posando frente a un fondo borroso de mar y muelle con un círculo rosa resaltando el paisaje

El rincón que ha escogido Laura Escanes para una escapada: Muchos quieren ir

La influencer firma un plan mediterráneo con Joan Verdú que ya inspira nuevas mini-vacaciones

Laura Escanes ha convertido las escapadas de fin de semana en una seña de identidad mediática y aspiracional para su comunidad digital. La última ha encendido el radar viajero de medio Instagram con un escenario cercano, mediterráneo y sorprendentemente accesible para una audiencia amplia. Sin revelar el destino de inmediato, la creadora insinuó un plan a pocos kilómetros de Barcelona, con playa, paseos al atardecer y hotel con encanto.

Sitges, el “planazo” improvisado que arrasa entre sus seguidores

La escapada fue a Sitges, un clásico de Catalunya que la influencer reivindicó como refugio inmediato para desconectar sin perder el pulso urbano. Ella misma habló de un “planazo improvisado” junto a Joan Verdú, compartiendo imágenes de playa, paseos marítimos y sobremesas largas frente al mar. La elección de un destino tan cercano explica por qué muchos seguidores lo ven como una escapada realista, bonita y fácil de replicar.

Las pistas en Instagram y el hotel que delatan el destino

En Instagram, Escanes escribió “analógicas de nuestros días en el mar” y mencionó directamente el perfil del ME Sitges Terramar. Las imágenes la situaban en el paseo marítimo, con estética analógica y una narrativa visual cuidada, reforzando la idea de escapada romántica a la orilla. Además, el reportaje apuntaba a una comida en Beso, el restaurante insignia del hotel, especializado en cocina vasco mediterránea con vistas directas al mar.

Mujer de perfil con dos trenzas, gorra blanca y azul, camiseta blanca de tirantes y collares dorados en un entorno al aire libre
Laura Escanes descansando en la playa | Instagram de Laura Escanes

La escapada llega en un momento dulce para Escanes, que recientemente oficializó su relación con el esquiador olímpico andorrano Joan Verdú. El deportista suma podios en Copa del Mundo y aporta a la pareja una narrativa deportiva que encaja con la estética outdoor de la creadora. Desde que confirmaron su noviazgo, ambos han compartido viajes de nieve y mar, consolidando una rutina de contenidos aspiracionales con altas tasas de interacción.

Menorca en verano y Sitges en primavera

Semanas después, las cuentas de pareja volvieron a arder con imágenes bajo el agua en Menorca, donde repitieron playa, abrazos y efecto postal instantáneo. Aquellas fotos reforzaron la coherencia del relato, alternando una escapada cercana con un destino balear de manual durante el pico estival. La comunidad respondió con entusiasmo y una petición recurrente: guías rápidas con hoteles, restaurantes y rincones fotogénicos al estilo de su feed.

Sitges combina acceso desde Barcelona, paseo marítimo de 2,5 kilómetros y una oferta gastronómica consolidada  que la audiencia reconoce sin esfuerzo. El municipio conserva casco antiguo con casas blancas y azules, detalles modernistas y una vida cultural que suma festivales, galerías y atardeceres memorables. El hotel ME Terramar suma el componente lifestyle con rooftop, beach club y el sello de Beso, pensado para sobremesas eternas frente al Mediterráneo.

Medios especializados señalaron que el hotel invitó a la pareja a cambio de promoción, un extremo que la influencer no confirmó en abierto. Nuestra verificación se apoya en el post de Instagram, en la localización del establecimiento y en la cronología difundida durante esos días. El grueso de la información coincide, y los detalles del hotel y su restaurante se corroboran en fichas y descripciones independientes del establecimiento.