La reina Letizia se ha negado a separarse de su hija Sofía durante este verano, un hecho que ha llamado la atención de muchos. Este gesto ha generado diversas especulaciones sobre las razones detrás de su decisión. Sin embargo, lo cierto es que detrás de esta actitud hay un motivo muy concreto y personal.
En los últimos días, se ha confirmado que Sofía se trasladará a Lisboa para iniciar sus estudios universitarios en septiembre. Esta nueva etapa supondrá la primera separación larga entre madre e hija. Por eso, la reina Letizia quiere aprovechar al máximo este verano para estar junto a su pequeña y fortalecer sus lazos familiares antes del cambio.

Este motivo también explica la ausencia prolongada de Letizia en actos públicos, especialmente en la gestión de los incendios que han asolado zonas de España. Mientras el rey Felipe ha tenido que interrumpir sus vacaciones privadas para atender a la crisis, la reina ha preferido mantenerse al margen. Su prioridad ha sido cuidar de Sofía y acompañarla en un momento tan crucial para ambas.
La reina Letizia apuesta por la intimidad familiar ante la inminente separación de la infanta Sofía
Letizia ha considerado que, en este momento, compartir tiempo con su hija es una prioridad en el plano personal. Sabe que pronto comenzará una nueva etapa en la vida de Sofía, con nuevos retos, responsabilidades y menos tiempo en común. Este verano representa, en muchos sentidos, una despedida emocional.

La reina siempre ha mostrado un vínculo muy estrecho con sus hijas, tanto con Leonor como con Sofía. Sin embargo, ahora que la princesa de Asturias está más centrada en sus deberes oficiales, Letizia ha centrado su atención en la menor. Esa cercanía se ha hecho aún más fuerte ante la inminente marcha de Sofía al extranjero.
La infanta Sofía marca la agenda familiar de la reina Letizia durante estas vacaciones
Desde Casa Real no se ha emitido ningún comunicado oficial sobre este asunto, como es habitual en temas privados. Aun así, el silencio y los hechos hablan por sí solos, especialmente cuando la reina ha evitado apariciones públicas sin justificación oficial. Para la reina, preservar el bienestar emocional de su hija ha sido lo más importante.
Con el traslado de Sofía a Lisboa cada vez más cerca, la reina Letizia se enfrenta a un cambio importante como madre. Este verano, más que un descanso, ha sido un momento de conexión familiar antes de una etapa nueva para ambas. Y es por eso, por lo que ha decidido no separarse de su hija ni un solo día más de lo necesario.