Meghan Markle ha sorprendido con una confesión que ha puesto al príncipe Harry en el centro de la conversación. La duquesa de Sussex, siempre hábil para combinar la espontaneidad con la naturalidad en sus apariciones, ha revelado un secreto que pocos conocían. Sus palabras, lejos de pasar desapercibidas, han corrido como la pólvora en Inglaterra y han vuelto a situar a la pareja en los titulares.
La revelación se ha producido durante la segunda temporada de With Love, Meghan, un espacio culinario en el que la esposa de Harry comparte recetas y vivencias con sus invitados. Ha sido en ese contexto distendido cuando la ex actriz ha confesado qué alimento no es del agrado de su marido. “¿Sabes a quién no le gusta la langosta? A mi esposo”, ha comentado con una sonrisa al chef José Andrés.

Este secreto ha despertado especial interés porque se relaciona directamente con una costumbre arraigada en la familia real británica. Tal y como ha recordado el exmayordomo del rey Carlos, Grant Harrold, los Windsor suelen evitar los mariscos por el riesgo de intoxicación alimentaria. Aunque Meghan no ha explicado el motivo de la aversión de Harry, la conexión con esa tradición ha dado pie a todo tipo de interpretaciones.
Meghan Markle abre una ventana al día a día junto al príncipe Harry fuera de Inglaterra
La duquesa no ha querido profundizar en las razones exactas, pero sí ha dejado entrever que la alimentación en la familia ha estado marcada por normas no escritas. Harry, que ahora reside en California con Meghan y sus dos hijos, sigue manteniendo ciertos hábitos que parecen heredados de su vida en Palacio. Este tipo de confidencias han generado una mezcla de simpatía y curiosidad en la audiencia británica, acostumbrada a las declaraciones más solemnes de la realeza.

No es la primera vez que Meghan aprovecha un espacio público para compartir aspectos personales de su matrimonio. Hace apenas unos días, en The Circuit, habló de cómo había cambiado su vida tras dejar la Casa Real. Aseguró que ahora se siente más libre para mostrarse tal cual es y que, durante su etapa en Buckingham, esa autenticidad había quedado relegada a un segundo plano.
Las anécdotas cotidianas de Meghan Markle captan la atención mediática
Sus palabras, tanto en uno como en otro programa, confirman la estrategia de la duquesa de proyectar una imagen cercana y auténtica. Si en el pasado el hermetismo era la norma dentro de la institución, ahora Meghan recurre a anécdotas cotidianas para conectar con su público. Y lo cierto es que estos pequeños detalles tienen un enorme eco mediático, sobre todo en el Reino Unido.
El secreto del príncipe Harry sobre la langosta puede parecer banal, pero llama especialmente la atención si se tiene en cuenta el distanciamiento que mantiene con su familia. Que un detalle gastronómico sea capaz de generar titulares en toda Inglaterra demuestra la atención constante que despierta la pareja. Una vez más, Meghan Markle ha sabido cómo dar que hablar con una confesión sencilla que ha conquistado a los espectadores.