Un hombre con gafas y barba está de pie frente a un fondo de ladrillos con un letrero de neón que dice "Selva".

Mazazo para Xavier Grasset: Qué le ha pasado

El presentador de TV3 lamenta este adiós histórico

La imagen sorprendió a sus seguidores y removió recuerdos de toda una generación en Catalunya. El periodista Xavier Grasset compartió unas fotos que destilan nostalgia y dejan claro que algunos cierres duelen más que una mala audiencia. El gesto activó el runrún en redes y puso nombre a una despedida que ya era un secreto a voces.

El adiós que conmueve a Reus

La cafetería y heladería Farggi de la Plaça del Mercadal, bajo los porches de la Casa Navàs, cerró tras dieciocho años de actividad. El cierre, anunciado con un cartel en la puerta, se ejecutó este sábado y deja huérfano un punto de encuentro muy reconocido. Los propietarios explicaron que se trata del final de una etapa, condicionada por la exigencia del negocio, más que por una quiebra súbita.

El local no queda vacío: reabrirá como Vivari, una cadena de cafeterías y pastelería rápida que ha multiplicado su presencia en los últimos años. La propia marca presume de más de 120 locales en Catalunya y se ha instalado en esquinas que antes ocupaban comercios  con sello de barrio. El fenómeno no es aislado, porque las franquicias de panadería y cafetería se han cuadruplicado en Barcelona en una década.

Un hombre con gafas y barba canosa lleva una chaqueta beige y una camisa de cuadros mientras está en un entorno con plantas y árboles.
Xavier Grasset presentando La Selva | TV3

Lo que dijo Grasset y cómo reaccionó la ciudad

Grasset difundió imágenes frente al escaparate clausurado y recogió el mensaje de despedida que agradecía la fidelidad del vecindario. El tono del presentador fue de pura melancolía, como quien asume que una parte de su biografía también baja la persiana con ese cierre. En redes locales, el vídeo del adiós se viralizó en horas y generó comentarios a favor de proteger el pequeño comercio, junto a otros que asumen la comodidad de las cadenas.

Identidad de barrio o expansión a golpe de franquicia

La llegada de Vivari encaja en un mapa urbano donde la restauración estandarizada se impone por economía de escala y horarios extendidos. Panaderos y hosteleros de toda la vida advierten de que el relevo generacional, la burocracia y los alquileres hacen casi imposible competir sin músculo financiero. La foto de Grasset sirve de síntesis: detrás de cada cierre hay memoria compartida y una ciudad que cambia sin pedir permiso.

Las cifras recientes confirman esa tendencia, que amenaza la diversidad comercial que sostenía la vida de plaza. Grasset, rostro de la franja vespertina con “La selva” tras su etapa al frente de “Més 324”, convirtió una noticia municipal en conversación cultural. Su condición de comunicador de referencia amplifica un lamento que, de otro modo, habría quedado en la esfera estrictamente local.