Su ausencia en los habituales actos veraniegos en Mallorca encendió todas las alarmas. La reina Sofía, siempre considerada pilar moral y emocional en la Casa Real, ha cancelado su viaje a Marivent. Desde entonces, el foco se ha puesto en el estado de salud de su hermana. La princesa Irene de Grecia, también conocida como “tía Pecu”, habría sufrido un severo empeoramiento en los últimos días.
Lo que ha ocurrido
Durante los últimos días de julio de 2025, fuentes próximas a Casa Real comunicaron que Irene ha experimentado un deterioro físico y cognitivo alarmante. Aunque no se han explicado públicamente los detalles médicos, se baraja que podría estar sufriendo algún tipo de Alzheimer avanzado, además de una evidente pérdida de movilidad.
Este cambio en su estado de salud ha llevado a la reina Sofía a permanecer en el Palacio de la Zarzuela. Así pues, este año pospone su tradicional estancia en Mallorca junto a Felipe VI, la reina Letizia y las infantas Leonor y Sofía.

No se ha emitido ningún comunicado oficial por parte de la Casa Real. El silencio institucional se mantiene, mientras medios como la revista Semana y Europa Press han difundido la noticia citando fuentes cercanas al entorno de la Reina.
La figura de Irene en la familia
Se ha filtrado que el rey Felipe VI intervino activamentepersuadiendo a Irene para que aceptara trasladarse al Palacio de Marivent este verano. De esta forma, garantizaba un entorno con cuidados especializados y presencia familiar constante. La princesa Irene, de 83 años, es la hermana menor de Sofía y vive desde hace décadas en el Palacio de la Zarzuela.
En 2002 superó un cáncer de mama tras un exigente tratamiento de quimioterapia y se convirtió en una figura aún más cercana a la reina de forma diaria. Ese fue uno de los primeros capítulos importantes de fragilidad pública, aunque Irene mantuvo siempre una imagen discreta y solidaria. Su última aparición pública fue en febrero de 2025, durante la boda de su sobrino Nicolás de Grecia. En la ceremonia fue vista en silla de ruedas, lo que alimentó las primeras especulaciones sobre su estado.

Estado actual y cuidado personal
Los informes apuntan a que Irene requiere atención continua debido a su movilidad reducida y el avance de trastornos cognitivos. Vive en Zarzuela bajo el cuidado constante de Sofía, quien ha asumido un rol protector más intenso que en otros veranos.
La propuesta de trasladarla a Marivent respondía al deseo de ofrecer un entorno adaptado y la posibilidad de una estancia relajada, rodeada de familia, con Sofía permaneciendo siempre cerca de ella. Este verano se presenta especialmente complejo en la vida personal de la reina Sofía. La salud de Irene obliga a reconsiderar tradiciones familiares y coloca el foco en un vínculo de solidaridad muy discreto pero profundo.