Hombre con uniforme militar y gorra, fondo morado.

Las excentricidades de Carlos III que no gustarán a sus súbditos

Las curiosas costumbres del rey Carlos III que revelan cómo es su día a día

Desde su proclamación en mayo 2023, Carlos III ha captado la atención no solo por su discurso institucional, sino por gestos aparentemente espontáneos en los que se refleja una impaciencia contenida. Cada acción, por mínima que parezca, se ha convertido en objeto de análisis. Sobre todo, teniendo en cuenta que tiene costumbres tan meticulosas que la prensa anglosajona ha llegado a bautizarle como “el monarca que no se conforma con lo corriente”, incluso "príncipe mimado".

Control absoluto sobre cada detalle

En su entorno real, insisten en que no todo son caprichos infundados, sino parte de una búsqueda de control ante la responsabilidad del trono. Según Paul Burrell, antiguo mayordomo de Diana, Carlos III exige rutinas casi rituales: su pijama y hasta los cordones deben estar perfectamente planchados cada mañana, y cada noche el enchufe de la bañera tiene que colocarse en una posición precisa para que el baño, siempre tibio, se llene justo hasta la mitad.

Este rasgo de su personalidad incluso tubo acto de presencia durante la proclamación, cuando en un momento protocolario, Carlos retiró con decisión una tinta de la mesa. Lejos de un gesto trivial, este episodio fue interpretado como un símbolo de que, aunque su investidura estuviera rodeada de pompa, él solo estaba cómodo si todo se ajustaba a sus hábitos personales.

Hombre mayor de cabello canoso con traje oscuro mirando hacia atrás en una calle de ciudad con una flecha roja señalando hacia él
Rey Carlos III del Regno Unido señalado por una flecha | XCatalunya, The Royal Family Web.

El imprescindible trono de viaje

Mucho se ha comentado que el rey Carlos III viaja con su propio inodoro portátil y rollos de papel Kleenex Velvet, junto a una cama y muebles que acompañan su equipaje oficial. Para él, esto no es capricho sino una condición innegociable. Según Tina Brown en The Palace Papers, la única señal de que todo esté listo es la llegada del camión con sus pertenencias.

En una entrevista sobre su vida personal, Paul Burrell comentó que Carlos III exige 2,5 centímetros exactos de pasta en el cepillo cada mañana. Algo que podría parecer trivial, pero que muestra su frenético deseo por mantener el control en detalles mínimos.

Desayunos a medida

La nutrición también es parte de su rutina. Siempre acompaña su desayuno con productos naturales como té Darjeeling, mieles variadas, frutos secos, ciruelas —aunque suele devolver una— y queso o galletas a temperatura específica. El chef Darren McGrady, ex residente real, confirma que el “desayuno va con él en caja a cualquier parte del mundo”.

Un hombre mayor con traje y corbata está rodeado de flores coloridas.
Rey Carlos III rodeado de flores | @theroyalfamily

No faltan voces críticas que califican estas pautas de obsesivas tras una personalidad perfeccionista, que busca orden frente al caos mediático. Las manías de Carlos III rasgan el velo público para mostrar a un rey que, tras 70 años preparándose, controla hasta el mínimo ápice de su entorno.