Kate Middleton con expresión seria mira hacia la izquierda mientras el príncipe Guillermo en blanco y negro aparece al fondo con gesto preocupado y un corazón roto con un signo de interrogación está en el centro

Kate Middleton (43 años) descubre qué pasaría si decide divorciarse de Guillermo

Salen a la luz las consecuencias que Kate Middleton sufriría si rompiera su matrimonio con el príncipe Guillermo

Imaginemos por un momento que Kate Middleton se divorciase del príncipe Guillermo. La idea, aunque hipotética, genera todo tipo de reacciones y especulaciones. En este marco, a sus 43 años, la duquesa de Cambridge ya sabe exactamente las consecuencias de su ruptura matrimonial.

Una experta en protocolo real ha adelantado las claves del que sería, sin duda, el divorcio que mayor expectación levantaría. No obstante, no sería el primero que se produciría en la monarquía británica. Como ejemplo se encuentra el protagonizado por Lady Di y Carlos de Inglaterra, ¿padecería Kate las mismas consecuencias que su suegra?

El príncipe Guillermo serio con traje y corbata azul y roja junto a Kate Middleton vestida de blanco con un tocado
El divorcio de Kate y Guillermo crearía una gran expectación | Europa Press

Kate Middleton conoce las consecuencias de su divorcio con el príncipe Guillermo

Hablar de Kate Middleton y del príncipe Guillermo es hablar de una de las parejas más consolidadas y queridas de la monarquía europea. Ellos representan la unidad y la fortaleza de un amor a prueba de bombas. Pero hubo un momento en su historia de amor que su romance estuvo en el punto de mira por las supuestas infidelidades de Guillermo.

Esto hizo que los medios se plantearan el escenario de una posible ruptura matrimonial. Ante eso, Middleton conoce a la perfección todas y cada una de las consecuencias que llevaría divorciarse del futuro rey y madre de su sucesor.

Mujer sonriente con tiara de perlas y diamantes, vestido elegante con detalles brillantes y moño amarillo
Kate Middleton perdería el tratamiento de Su Alteza si se divorciara | Instagram, @princeandprincessofwales

En primer lugar, lo más probable es que Kate perdiera el tratamiento de 'Su Alteza Real'. Históricamente, tras un divorcio real, se suele retirar ese distintivo honorífico. Ya pasó con Lady Di, cuyo caso sirve de ejemplo para conocer con exactitud lo que pasaría con Middleton.

Sin embargo, podría conservar el título de Duquesa de Cambridge y el de Duquesa de Cornualles, esto dependería de los acuerdos establecidos.

Una pareja elegantemente vestida sale de un edificio, la mujer lleva un ramo de flores y un conjunto rojo.
Kate Middleton llegaría a un acuerdo económico muy cuantioso | Europa Press

En cuanto al dinero, su estilo de vida no se vería prácticamente alterado. Si la separación ocurriera, Kate probablemente recibiría un acuerdo financiero similar o mayor al que recibió Diana. En su momento fueron millones y manutención anual; hoy, según una experta en protocolo real, serían más.

Tampoco disminuiría el foco mediático, de hecho, podría intensificarse. Abandonar la familia real atrae la atención de los paparazzi más que quedarse dentro. Kate Middleton tendría aún más exposición pública, tal como pasó con su suegra o Meghan Markle.

El punto más delicado entre Kate Middleton y el príncipe Guillermo

Sin duda, la cuestión más delicada sería la relacionada con el futuro de los tres hijos de Kate y el príncipe Guillermo. La custodia de sus hijos no sería tan sencilla como en una separación de pareja cualquiera. Por ley antigua británica, la custodia legal de los hijos reales corresponde al soberano reinante.

Si llegase el divorcio antes de que Guillermo sea rey, el rey Carlos III tendría la última palabra sobre con quién se quedan los niños. Aunque en la práctica Kate y el príncipe Guillermo podrían seguir copaternando, como Diana y Carlos lo hicieron tras su divorcio.

Un grupo de personas vestidas formalmente saludando desde un balcón.
Guillermo y Kate podrían compartir la custodia de sus hijos | Europa Press

Sus vidas sentimentales también darían un giro drástico con claras diferencias. Al convertirse en una civil, Kate podría volver a casarse sin tantas formalidades. Mientras tanto, el príncipe Guillermo necesitaría permiso real para hacerlo, como ocurrió cuando el actual rey contrajo matrimonio tras su divorcio.

Pero Kate y Guillermo no serían los únicos que sufrirían las consecuencias de un divorcio: la imagen general de la institución se vería sacudida. Los príncipes de Gales gozan de una gran popularidad y gran parte del pueblo británico confía en su reinado. Si se separaran se generaría una inestabilidad que complicaría el futuro de la Corona.

En este sentido, resulta más sencillo intentar solucionar los problemas de pareja, respetarse y llegar a un acuerdo para evitar la mayor de las catástrofes. Por el momento, Reino Unido puede estar tranquilo, pues la salud del matrimonio entre Kate y el príncipe Guillermo es perfecta.