Mujer mayor de cabello rubio claro con expresión seria y un collar elegante, junto a una sirena de emergencia roja en primer plano

Grave problema de salud para la Reina Sofía: Felipe VI en shock

El verano está siendo complicado para la familia real española

La imagen de la Reina Sofía ha sido siempre la del pilar estoico de la monarquía, especialmente teniendo en cuenta el comportamiento de su todavía marido. Sin embargo, tras los muros de Zarzuela se libra una batalla mucho más íntima y dolorosa.

A sus 86 años, la emérita atraviesa uno de los momentos más desoladores de su vida, una crisis personal que culminó hace apenas unos días con un susto que ha hecho temblar los cimientos de palacio y ha puesto de manifiesto la profunda soledad que la envuelve.

Lejos del bullicio de Marivent, este verano en Madrid se ha tornado gris para Doña Sofía. La procesión va por dentro, y el desgaste emocional de los últimos años finalmente le ha pasado una factura física muy severa, revelando las grietas de una familia cada vez más fracturada. Y todo sin contar el precario estado de salud de su hermana Irene. La 'tía Pecu', como se la conoce familiarmente, tiene problemas de movilidad y algunas fuentes indican que también sufriría Alzheimer.

Una pareja caminando frente a un edificio elegante.
Montaje de Zarzuela con Felipe y Letizia en primer término | Casa Real, XCatalunya

Un susto en Zarzuela: el infarto asintomático que lo cambió todo

La tensión acumulada encontró su punto de ruptura el pasado domingo por la tarde. Sin los síntomas habituales que alertan de un problema cardíaco, como el dolor agudo en el pecho o la falta de aire, la Reina Sofía sufrió, según informa En Blau, lo que se conoce como un infarto asintomático. Una dolencia traicionera y especialmente peligrosa en personas de edad avanzada, que a menudo se confunde con un simple malestar o una fatiga pasajera.

Aunque la ausencia de dolor puede llevar a subestimar su gravedad, el daño al músculo cardíaco puede ser permanente. Este episodio fue una señal inequívoca de que su cuerpo ha dicho basta. El susto fue mayúsculo y obligó a replantearse todos los planes. La decisión de no viajar a Palma este año, que en un principio se atribuyó a su deseo de permanecer junto a su hermana, cobró entonces un nuevo y preocupante significado. El verdadero motivo era que su salud pendía de un hilo.

Felipe VI mantiene la agenda mientras sus hermanas cierran filas con su madre

La reacción al grave problema de salud de la emérita ha sido el reflejo perfecto de la situación familiar actual. Las infantas Elena y Cristina no tardaron en cerrar filas en torno a su madre. La primogénita de los eméritos la visita a diario, convirtiéndose en su principal apoyo. Por su parte, Cristina no dudó en cancelar sus planes de vacaciones para permanecer en Madrid, demostrando que, en los momentos cruciales, la unión con su madre es inquebrantable.

Dos personas mayores posan juntas, una de ellas lleva un traje oscuro con corbata rosa y la otra un conjunto de cuadros con pendientes dorados.
Juan Carlos y Sofia | Casa Real, XCatalunya

Sin embargo, la actitud de Felipe VI ha generado un notable malestar en el círculo más íntimo de Doña Sofía. A pesar de la gravedad de la situación, el Rey ha optado por mantener su agenda oficial sin alteraciones, proyectando una imagen de frialdad y distancia que duele especialmente a su madre. Algo que ha sorprendido si tenemos en cuenta que el rey de España siempre ha tenido una relación muy estrecha con su madre.

Cada vez más alejada de sus nietos

A este dolor se suma el enfriamiento de la relación con sus nietos. El contacto con la Princesa Leonor y la Infanta Sofía es prácticamente institucional, limitado a actos oficiales o a las vacaciones pactadas en Marivent.

Una familia posando para una fotografía en blanco y negro con un fondo liso.
Familia Real con los eméritos y los hijos muy jóvenes | Reddit

El resto de sus nietos tampoco mantiene con ella el vínculo estrecho de antaño. Este cúmulo de ausencias ha llevado a la emérita a tomar una decisión drástica: su deseo es trasladarse a Grecia para acompañar a su hermana en sus últimos meses y cumplir su voluntad de morir en su tierra natal.

Un anhelo que suena a despedida y a una búsqueda desesperada de paz, lejos de un entorno familiar que, en muchos sentidos, la ha dejado sola.