En Valdebebas, los veranos suelen ser sinónimo de actividad frenética y decisiones de última hora. La nueva temporada arranca en apenas unos días y el club blanco afronta un reto conocido: cómo gestionar una plantilla de máximas estrellas donde cada jugador cuenta, pero no todos caben. La competencia ofensiva en el Real Madrid está al límite, y cualquier movimiento puede cambiar el escenario de una temporada entera.
La polivalencia y el talento de Brahim Díaz siempre han llamado la atención fuera del Santiago Bernabéu. Este verano, su nombre vuelve a sonar con fuerza. Según fuentes de CNN Portugal, Récord y también varios periodistas turcos, el Benfica y el Fenerbahçe han iniciado contactos exploratorios con el Real Madrid para conocer la disponibilidad del internacional marroquí. El club portugués busca un perfil creativo para suplir la salida de João Félix y ve en Brahim al candidato perfecto para liderar su ataque en Champions League.
El Fenerbahçe, por su parte, confía en el aval de José Mourinho para convencer al jugador, aportando la experiencia de un técnico que conoce la exigencia de LaLiga. La oferta de ambos clubes resulta atractiva, no solo desde el punto de vista económico, sino deportivo: ser protagonista, jugar Champions y volver a sentirse esencial en un vestuario.

El Real Madrid no descarta una venta, pero la decisión final depende de Brahim y Xabi Alonso
La directiva blanca está abierta a escuchar ofertas, aunque no regalará a un jugador con contrato y valor de mercado creciente. En Valdebebas tasan a Brahim en 60 millones de euros. Un precio elevado, pero acorde a la inflación actual del fútbol internacional y al rendimiento que ha dado el jugador en los últimos dos años.
No obstante, el Real Madrid no tiene prisa por cerrar la operación. Xabi Alonso valora el rol de Brahim como revulsivo de lujo. El entrenador ha transmitido su deseo de recuperar al mejor Brahim y cuenta con él como una alternativa para dar descanso a Vinicius, Mbappé o incluso Bellingham, según el sistema elegido en cada partido. Esta temporada será la tercera del malagueño en la casa blanca, con 117 partidos, 20 goles y 19 asistencias en su historial. Su impacto desde el banquillo ha sido clave para lograr varios títulos nacionales e internacionales.

El jugador, decidido a quedarse pese a las tentaciones del mercado
Pese a la presión mediática y el atractivo de las ofertas, Brahim Díaz mantiene una idea clara: pelear por un puesto en el Real Madrid. Así lo ha manifestado a su entorno y al club, rechazando de momento cualquier salida definitiva o cesión, tal y como ha asegurado Defensa Central. El jugador quiere ser importante en un equipo que compite por todos los títulos y sabe que, en una temporada larga y exigente, su oportunidad llegará.
En la última campaña, Brahim anotó seis goles en 48 partidos, la mayoría de ellos como suplente. Su capacidad para actuar en cualquiera de las tres posiciones del ataque y su capacidad para decidir partidos en los minutos finales le han convertido en un comodín imprescindible para Xabi Alonso.
De todas formas, parece evidente que se va a producir un movimiento en la zona del atacante blanco. Si Brahim Díaz se marchara, inmediatamente se detendrían las voluntades de salida de Rodrygo o la de Endrick, que hoy ha trascendido que estuvo muy cerca de firmar una cesión con la Real Sociedad.