El técnico del FC Barcelona, Hansi Flick, ha hablado por primera vez sobre la salida de Iñigo Martínez. El central vasco ha abandonado el club rumbo al Al-Nassr saudí. Su marcha ha sido inesperada para muchos en el entorno culé. Flick no ha ocultado su tristeza ante la pérdida.
Iñigo Martínez fue clave la pasada temporada. Su liderazgo, su fuerza y su entrega destacaron desde el primer día. A pesar de algunos problemas físicos, siempre respondió con compromiso. Su salida, sin embargo, estaba casi cerrada al inicio de la pretemporada.
Una oferta imposible de rechazar
Era la última gran oportunidad económica para él y su familia. El Barça respetó su decisión desde el primer momento. El central disputó solo el primer amistoso ante el Vissel Kobe en Japón. Después, se ausentó por fatiga muscular. Pero su marcha ya se había comunicado a Flick y al vestuario en el vuelo de regreso desde Corea.

“Me sorprendió mucho su decisión, pero la entiendo totalmente”, declaró. También añadió: “Es un gran jugador y una persona increíble. Siempre dio el máximo por el equipo”. Flick también confesó que Iñigo era uno de los líderes silenciosos del vestuario. “Nunca pedía nada. Siempre sumaba, ayudaba y transmitía intensidad”, dijo. “Me ha encantado entrenarle, le deseo lo mejor en esta nueva etapa”, concluyó.
No habrá sustituto en el mercado
Preguntado por un posible fichaje para sustituirlo, Flick fue claro. El club no buscará otro central zurdo. Cree que hay opciones suficientes en la plantilla actual. Y confía especialmente en Gerard Martín, canterano que ha crecido mucho.

“El año pasado jugó fantásticamente. Puede adaptarse a varios roles defensivos”, explicó el entrenador alemán. También valoró su capacidad táctica, su entrega y su perfil zurdo, que ahora es clave para cubrir la baja de Iñigo.
La pérdida de un pilar defensivo
Su figura era respetada dentro y fuera del campo. Flick y el cuerpo técnico valoran seguir apostando por la cantera. Confían en que Araujo, Koundé, Christensen y el propio Gerard Martín puedan cubrir el vacío. Pero es evidente que Iñigo era un perfil difícil de reemplazar.
La oferta del Al-Nassr llegó en un momento clave. Y el jugador tomó una decisión pensando en su futuro. Flick no quiso poner ningún obstáculo. “Fue honesto, directo y transparente”, dijo el alemán. “Eso también se valora mucho en un vestuario”. Desde la dirección deportiva se entendió que era una salida inevitable.
Un recuerdo imborrable
Pese a su corto paso por el Barça, Iñigo Martínez deja huella. Su profesionalidad, su espíritu de lucha y su amor por el juego serán recordados. Flick lo sabe. “Jugadores así siempre suman. Es un ejemplo dentro del fútbol moderno”, aseguró. El central vasco inicia ahora su aventura en Arabia. Pero su huella en el vestuario culé permanecerá.