El Barça sufrió su segunda derrota de la temporada y aunque el gol anulado a Robert Lewandowski ha generado polémica, existen claves tácticas que explican el mal funcionamiento del equipo. Fermín Suárez, analista futbolístico, señaló en sus redes sociales varios aspectos tácticos que fueron determinantes para el resultado final. Puso el foco en la salida de balón del Barça, la principal debilidad en el partido, y explicó cómo la Real aprovechó esto para mantener la presión durante los 90'.
La Real Sociedad ejecutó una presión intensa y sostenida que bloqueó la construcción de juego del Barça. Según Fermín Suárez, el equipo de Imanol Alguacil planteó una defensa enfocada en evitar que el Barça progresara desde su propia área, algo que funcionó de forma eficaz. El Barça intentó salir desde atrás en 42 ocasiones, pero solo logró llegar al campo rival en 13 de ellas, mostrando la efectividad de la estrategia de presión de los locales.
Una de las claves que Suárez destacó fue la inactividad de los laterales del Barça. Arambarri y Aihen obligaron a Raphinha y Lewandowski a retroceder, reduciendo la profundidad del ataque. Koundé y Balde, los laterales del Barça, no encontraron espacio para avanzar, lo que limitó las opciones ofensivas. La falta de movimientos hacia atrás y la ausencia de un "tercer hombre" que pudiera asistir en la salida desde el área propia también fueron aspectos que complicaron la situación para el equipo de Hansi Flick.
El foco en Iñaki Peña y en Raphinha
En su análisis, Suárez resaltó que uno de los errores más visibles fue el uso de Iñaki Peña como apoyo en la salida de balón. El arquero catalán, en lugar de utilizar sus habilidades para romper la primera línea de presión, optó por jugar en corto, lo que facilitó el trabajo de la Real Sociedad. Este enfoque conservador invitó a los jugadores de la Real Sociedad a acercarse y presionar, dejando al Barça sin espacios para maniobrar.
Suárez también subrayó que Raphinha, conocido por su dinamismo, estuvo menos activo de lo habitual. Se esperaba que el brasileño asumiera un rol más ofensivo, pero su bajo rendimiento contribuyó a la falta de opciones para romper la defensa de la Real. La Real Sociedad aprovechó esto para reforzar su presión, limitando la posesión del Barça y obligándolo a realizar pases arriesgados desde su propio campo.
Finalmente, Fermín Suárez mencionó que los intentos del Barça de reiniciar jugadas desde su defensa generaron una falsa sensación de control. El equipo se mantuvo con una estructura defensiva baja y sin asumir riesgos, lo cual facilitó que la Real Sociedad se adelantara en el marcador. Esta táctica llevó al error que derivó en el gol de la Real Sociedad, cuando un balón rifado desde la defensa del Barça fue recuperado rápidamente por los jugadores locales.