La planificación veraniega del Atlético de Madrid vive uno de sus momentos más clave. Después de varios movimientos en diferentes posiciones, todas las miradas se centran ahora en el centro de la defensa. La temporada 2025/26 exige reforzar la zaga con al menos un central de garantías, y todo apunta a que ese fichaje podría cerrarse muy pronto. Sin embargo, el mercado se ha complicado en las últimas horas con la irrupción inesperada de un viejo conocido.
Renato Veiga, el elegido desde hace semanas
Durante los últimos días, el nombre de Renato Veiga ha estado en la primera línea de la agenda rojiblanca; un movimiento que confirmó Fabrizio Romano. El central portugués, de 21 años, es propiedad del Chelsea y viene de una cesión en la Juventus, donde dejó buenas sensaciones. Su polivalencia —puede actuar también como pivote defensivo o lateral izquierdo— es uno de los grandes motivos por los que el Atlético ha apostado fuerte por él.
La operación se ha estado negociando de forma fluida gracias a la buena relación entre Chelsea y Atlético, que en el pasado han cerrado operaciones como las de Joao Félix y Gallagher. Los ingleses, con exceso de jugadores, necesitan aligerar plantilla, y ven en Veiga una oportunidad para ingresar una cifra cercana a los 40 millones de euros.

Además, el club londinense estaría dispuesto a facilitar el pago a plazos, algo clave para un Atlético que no atraviesa su mejor momento económico. Según ha informado Fabrizio Romano, el acuerdo está bien encaminado, aunque todavía no cerrado. De hecho, al elenco del Metropolitano le gustaría reducir el monto.
David Hancko vuelve a escena y lo cambia todo
La situación ha dado un giro inesperado con la aparición de David Hancko. El central eslovaco, que ya interesó al Atlético el verano pasado, ha sido ofrecido nuevamente en las últimas horas. Esta vez, las condiciones económicas son más atractivas: su precio ronda los 25 millones de euros y su fichaje sería más inmediato.
Hancko es un perfil más clásico, con potencia física, juego aéreo dominante y experiencia en la Eredivisie y la selección de Eslovaquia. Aunque su polivalencia no es tan marcada como la de Veiga, sí podría encajar bien en el sistema defensivo de Simeone.
La clave ahora está en la decisión técnica. Desde el entorno rojiblanco se desliza la posibilidad de que el Cholo apueste por una defensa de cinco hombres, lo que abriría la puerta a la llegada de ambos jugadores. Pero esa opción no está confirmada, y lo más probable, si no hay salidas imprevistas, es que solo uno de los dos acabe firmando.
Actualmente, el Atlético cuenta con José María Giménez, Robin Le Normand y Clément Lenglet como centrales puros. La necesidad de un cuarto central es evidente, y más aún si se tiene en cuenta la tendencia de Simeone a reforzar el eje de la defensa en campañas con alta carga de partidos.