La oscuridad de la noche, a menudo cómplice del silencio y el descanso, se rompió de la forma más trágica y abrupta. Un joven de apenas 30 años vio su vida segada en el asfalto cuando la madrugada apenas despuntaba, convirtiendo una carretera principal en el escenario de un desenlace fatal. La violenta colisión no dio opción, y los ecos de la frenada y el impacto dieron paso al lúgubre sonido de las sirenas que acudían, una vez más, a certificar una nueva tragedia vial.
El funesto suceso tuvo lugar en el término municipal de Vélez-Málaga, en la provincia de Málaga. Eran aproximadamente las tres y cuarto de la madrugada de este domingo cuando el servicio de Emergencias 112 comenzó a recibir varias llamadas desesperadas.
Los alertantes informaban de una colisión entre un turismo y una motocicleta en el kilómetro 268 de la carretera N-340, y lo que era peor, notificaban la presencia de una persona tendida sobre la calzada, gravemente herida.
Una colisión fatal en la madrugada
Las circunstancias exactas del choque están ahora bajo investigación por parte de la Guardia Civil de Tráfico, que trabaja para reconstruir la secuencia de los hechos que culminó con el fatal impacto. Lo que se sabe es que la colisión entre el coche y la moto fue de una virulencia tal que el motorista se llevó la peor parte. A la llegada de los primeros servicios de emergencia, la escena era desoladora.
Los sanitarios que se desplazaron hasta el lugar del accidente solo pudieron confirmar la terrible noticia. A pesar de la rapidez en la respuesta, nada se pudo hacer por salvar la vida del hombre de 30 años, cuyo fallecimiento se produjo en el mismo punto del siniestro. La carretera, testigo mudo de la tragedia, quedó marcada por los restos del impacto, un recordatorio sombrío de la extrema vulnerabilidad de los motoristas en la vía.
Amplio despliegue de emergencias en la N-340
La sala coordinadora del 112 activó de inmediato un amplio dispositivo para hacer frente a la situación. Se movilizó al Centro de Emergencias Sanitarias 061, que envió una UVI móvil con la esperanza de poder revertir la situación de la víctima. Simultáneamente, se dio aviso a la Guardia Civil de Tráfico, a los efectivos de Mantenimiento de Carreteras para señalizar y asegurar la zona, y a la Policía Local de Vélez-Málaga, que también acudió para prestar apoyo.
Durante toda la intervención de los servicios operativos y mientras la comitiva judicial procedía al levantamiento del cadáver, la carretera N-340 permaneció completamente cortada al tráfico en ese punto kilométrico.
Esta medida fue indispensable para permitir que los profesionales trabajaran con seguridad y para recabar todas las pruebas necesarias que ayuden a esclarecer las responsabilidades del siniestro. El corte de la vía se prolongó durante varias horas en la quietud de la noche, hasta que finalmente se pudo restablecer la circulación una vez finalizadas todas las labores.
La Axarquía, de luto por otra vida perdida en la carretera
Este trágico accidente vuelve a teñir de luto las carreteras de la comarca de la Axarquía. La N-340, una vía que vertebra gran parte de la costa malagueña, es un eje con una enorme densidad de tráfico, especialmente durante los fines de semana y la época estival. Es también, por desgracia, un escenario recurrente de accidentes de diversa consideración, siendo los usuarios de vehículos de dos ruedas uno de los colectivos más frágiles.