El verano invita a disfrutar del mar, pero hay días en los que la naturaleza obliga a extremar la precaución y cambia los planes de muchos bañistas. Una reciente decisión de las autoridades ha impactado de lleno a los residentes y visitantes de una popular localidad costera, generando inquietud entre quienes habían planeado pasar la jornada a orillas del Mediterráneo.
Ocho playas cerradas por riesgo meteorológico
Durante la jornada del 29 de julio, Protecció Civil ha decretado la bandera roja en todas las playas de Sant Pere Pescador, en el Alt Empordà, como consecuencia de la adversa meteorología. Este municipio, conocido por la extensión de su litoral y su atractivo para turistas y deportistas, ha visto interrumpido el acceso al baño en sus ocho arenales debido al fuerte viento que azota la zona. La prohibición de bañarse es total y responde a la necesidad de garantizar la seguridad de las personas ante unas condiciones marítimas especialmente peligrosas.
La decisión llega después de que, el día anterior, ya ondearan las banderas rojas en el mismo municipio, evidenciando que el episodio meteorológico no es un hecho aislado, sino una situación sostenida que mantiene en vilo tanto a los servicios de emergencia como a los usuarios habituales de la playa. Según la información publicada por el perfil oficial de Protección Civil, la medida responde a la presencia de fuertes vientos que incrementan el riesgo de incidentes, dificultando el rescate en caso de accidente y multiplicando el peligro de corrientes marinas imprevisibles.

Más de 150 playas catalanas en alerta: un verano marcado por la prevención
No solo Sant Pere Pescador se ha visto afectado por las restricciones. A lo largo de toda la costa catalana, más de 150 playas han tenido que izar la bandera amarilla, avisando de precaución ante el baño debido a las condiciones adversas del mar. Este fenómeno no es excepcional en pleno verano, pero sí llama la atención la persistencia de episodios de viento y oleaje que están dificultando la normalidad en una de las épocas más esperadas del año.
La web de referencia de la Generalitat ofrece un visor actualizado donde consultar en tiempo real el estado de cada playa, una herramienta fundamental para planificar cualquier salida al litoral. La importancia de respetar las señales de los servicios de emergencias no solo responde a un criterio legal, sino que puede suponer la diferencia entre la seguridad y el riesgo de situaciones trágicas.
Antecedentes recientes: el recuerdo del último ahogamiento
El municipio de Sant Pere Pescador todavía tiene muy presente el suceso del pasado 15 de julio, cuando un bañista perdió la vida en la playa de Can Martinet. Aquel trágico incidente es un doloroso recordatorio de que el mar, pese a su belleza, puede convertirse en un entorno hostil si no se respetan las advertencias. En ese caso, las condiciones también eran complicadas y el rescate resultó imposible. Las banderas rojas, por tanto, no son solo un símbolo, sino una herramienta de prevención imprescindible.
En lo que va de verano, los ahogamientos y accidentes en las playas catalanas han puesto en alerta a las autoridades, que insisten en la necesidad de extremar la prudencia y atender todas las indicaciones. La vigilancia constante de los socorristas y la rápida reacción de Protección Civil son la principal garantía de que la playa siga siendo un espacio seguro para todos.