Increíble pero cierto. La Audiendia Provincial de Valencia ha decidido absolver a una mujer acusada de asesinar a su bebé. Los hechos sucedieron en la localidad de Vilamarxant y la mujer se enfrentaba a un mínimo de quince años de prisión. Tras valorar todas las pruebas, ni Fiscalía ni magistrados tuvieron ninguna duda sobre la autoría del crimen, pero sí sobre la decisión que había que tomar.
La absolución se explica porque la mujer padecía un brote de psicosis posparto en el momento en el que degolló al menor de once meses. No irá a la cárcel y los jueces le han impuesto la pena de libertad vigilada, además de la de someterse a un tratamiento médico durante cinco años. Los jueces no lo dudaron ni un instante, pues incluso dictaron la sentencia in voce, es decir, en sala, en el mismo momento.
Los hechos sucedieron el 27 de febrero de 2023. La mujer degolló a su bebé y luego se lanzó al vacío desde una azotea. No murió y los servicios del SAMU lograron estabilizarla y luego la llevaron al Hospital de la Fe de Valencia, donde lograron salvarle la vida.
Documentos claves
Según ha explicado el diario Levante, la Audiencia Provincial de Valencia valoró un documento del Instituto de Medicina Legal que establecía que la acusada era inimputable por el hecho de que presentaba sus facultades totalmente anulables por un cuadro de psicosis posparto.
La Audiencia Provincial de Valencia ha decretado la absolución de una mujer acusada de asesinar a su bebé en la localidad de Vilamarxant tras quedar constatado que la procesada padecía un brote de psicosis posparto cuando degolló al menor de once meses. No obstante, se le ha impuesto la libertad vigilada y la obligación de ser tratada médicamente durante cinco años.
Pacto entre la Fiscalía y la defensa de la mujer
Las partes llegaron a un acuerdo de conformidad y el juicio no llegó ni a celebrarse. Ministerio Público y abogado de la defensa decidieron imponerle la pena de libertad vigilada y el sometimiento al curso de reeducación, una medida que también tuvo que ser avalada por la propia acusada.
Guardia Civil y Ayuntamiento de Vilamarxant
Los agentes de la Guardia Civil siempre mostraron su disconformidad con el documento que establecía su inimputabilidad. El consistorio explicó en su momento que no le constaba ningún documento ni ningún dato que acreditara este extremo. La policía señala que tuvieron conocimiento que la mujer acudía al médico para que le recetara Orfidal para la ansiedad.