Un plácido domingo por la tarde, de esos que invitan a disfrutar del asfalto y el paisaje, se tornó en una pesadilla para un aficionado a las dos ruedas. Lo que comenzó como una ruta para gozar de la libertad y las curvas acabó con una dramática caída por un barranco, movilizando un complejo operativo de rescate y poniendo de manifiesto, una vez más, la extrema vulnerabilidad de los motoristas en la carretera.
La jornada dominical quedó marcada por el ulular de las sirenas y el rugido de un helicóptero en una carrera contrarreloj por salvar una vida.
El suceso tuvo lugar este domingo, cuando el reloj marcaba las 17:51 horas. Fue en ese momento cuando los servicios de emergencias recibieron el aviso de un grave accidente. Un motorista que circulaba en solitario había perdido el control de su vehículo por causas que todavía se encuentran bajo investigación, precipitándose por un barranco en un tramo especialmente complejo de la red viaria de la provincia de Tarragona.
El accidente se produjo en la carretera TV-7044, a la altura del punto kilométrico 3,6, dentro del término municipal de La Riba, en la comarca del Alt Camp.
Despliegue de emergencias en una zona de difícil acceso
La orografía donde ocurrió el siniestro complicó notablemente las labores de los equipos de rescate. La caída por el terraplén hizo indispensable la intervención de medios aéreos. El Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM) activó un helicóptero medicalizado para poder acceder al herido, estabilizarlo en el lugar del accidente y proceder a su evacuación con la máxima celeridad y seguridad posibles.
Tras una primera atención de urgencia en el mismo barranco, el motorista fue evacuado en estado grave. El destino fue el Hospital Joan XXIII de Tarragona, centro de referencia para politraumatismos en la región, donde ingresó para ser tratado de las graves heridas sufridas en el impacto y la posterior caída. Agentes del Servei Català de Trànsit también se desplazaron al lugar para regular la circulación e iniciar la recopilación de pruebas que ayuden a esclarecer las circunstancias exactas que provocaron la salida de vía.
Investigación en curso y la vulnerabilidad del colectivo motorista
Mientras el motorista lucha por recuperarse, se ha abierto una investigación para determinar la causa del accidente. Se barajan múltiples hipótesis, desde un exceso de velocidad, una distracción momentánea, el estado del asfalto o un posible fallo mecánico. Lo que es indudable es que este suceso vuelve a poner el foco sobre la fragilidad de los conductores de motocicletas.
En un trazado de montaña como el de la TV-7044, cualquier imprevisto o error de cálculo se magnifica. La ausencia de carrocería convierte el cuerpo del piloto en el único escudo, y una salida de vía que para un coche podría saldarse con daños materiales, para un motorista, puede tener consecuencias fatales.
Este accidente es un crudo recordatorio de que la pasión por las dos ruedas y la emoción de las curvas deben ir siempre acompañadas de una conciencia elevada del riesgo y un respeto escrupuloso por las normas y los propios límites. La carretera, y más en parajes tan bellos como traicioneros, no perdona.