El domingo ha dejado una jornada marcada por la alarma y la preocupación en algunas de las playas más frecuentadas de la Costa Daurada. Lo que para muchos era una tarde de verano cualquiera, ha terminado convirtiéndose en una carrera contrarreloj para los servicios de emergencia. La gravedad de los hechos y la rápida intervención de los equipos de salvamento han vuelto a evidenciar los riesgos que pueden esconder los entornos naturales más atractivos del litoral catalán.
Un salto desde las rocas con final crítico en Tarragona
El episodio más grave de la jornada se produjo poco después de las seis de la tarde, cuando un joven de 29 años resultó herido crítico tras lanzarse al agua desde unas rocas en la cala Cossis, un enclave conocido por su acceso difícil y su belleza, situado entre la playa del Miracle y La Savinosa, en Tarragona. Según las primeras informaciones, publicadas por el Diari de Tarragona, tras el salto el joven habría sufrido un fuerte traumatismo, perdiendo la conciencia y quedando a merced de la corriente en una zona donde la vigilancia es limitada y la intervención de los socorristas, más complicada.
La alerta llegó al 112 poco después de los hechos. De inmediato, se activó un dispositivo de rescate en el que participaron efectivos de la Creu Roja, el Servei d’Emergències Mèdiques (SEM), los Bombers y la Guàrdia Urbana de Tarragona. Al no disponer de un puesto fijo de socorrismo en la cala —algo habitual en los puntos más recónditos del litoral—, fueron otros bañistas quienes alertaron de la gravedad del suceso y colaboraron en las primeras tareas de auxilio.

Dada la sospecha de una posible lesión medular, los servicios médicos optaron por trasladar al herido en helicóptero hasta el hospital Vall d’Hebron de Barcelona, donde permanece ingresado en estado grave. Fuentes médicas no descartan secuelas severas debido al tipo de impacto sufrido, un extremo que será clave en la evolución del joven en las próximas horas.
Otro bañista, crítico en Cambrils tras perder la conciencia
El suceso de Tarragona coincidió en el tiempo con otro episodio grave en la playa del Cavet, en Cambrils. Allí, un hombre de 65 años perdió la conciencia mientras se encontraba en el agua, generando escenas de tensión entre los bañistas. La rápida reacción de los presentes, que lograron sacar al hombre a la orilla, fue fundamental para evitar un desenlace aún más trágico.
En esta ocasión, la intervención de los socorristas de la playa fue inmediata. Junto al personal sanitario del SEM, practicaron maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) y lograron estabilizar a la víctima, que recuperó la conciencia antes de ser trasladada al hospital Joan XXIII de Tarragona. El pronóstico es crítico y el paciente permanece bajo observación intensiva.

Cabe destacar que, en el momento del incidente, la bandera amarilla ondeaba en la playa del Cavet, advirtiendo a los usuarios del baño de las condiciones adversas y la necesidad de extremar la precaución.
La sucesión de accidentes graves en playas de Tarragona y Cambrils en apenas unas horas pone de manifiesto el peligro que, en ocasiones, pueden entrañar las zonas de baño, especialmente aquellas donde el acceso es complicado o donde la vigilancia no es permanente. Las calas recónditas y los acantilados, tan atractivos para quienes buscan emociones fuertes, pueden convertirse en trampas mortales en caso de accidente.