La mañana de este viernes transcurría con aparente normalidad para los conductores que se dirigían hacia la zona sur de la Costa Daurada. Algunos habían planificado su rutina diaria con la esperanza de llegar puntuales a sus destinos. Sin embargo, un suceso inesperado interrumpió por completo la fluidez habitual del tráfico.
Poco después de las siete de la mañana, los vehículos comenzaron a detenerse en el tramo de la AP-7 comprendido entre l’Hospitalet de l’Infant y l’Ametlla de Mar. Algunos conductores, sorprendidos por la parada repentina, encendieron luces de emergencia para advertir a los que venían detrás. A los pocos minutos, se supo que se había producido un accidente grave en dirección sur (sentit Alcanar).
La llamada de alerta al teléfono de emergencias 112 se registró a las 6:52 h. Según la información facilitada por los Bombers de la Generalitat, en el siniestro se han visto involucrados una furgoneta y un camión que ha quedado volcado lateralmente. Este hecho obligó a cortar por completo la circulación en el tramo afectado para garantizar la seguridad y facilitar las labores de asistencia.
La AP-7, una de las arterias principales del tráfico en la zona, permanece bloqueada en un tramo de 7,5 kilómetros, causando retenciones y obligando a los conductores a buscar rutas alternativas. A pesar de que la noche ya había dado paso a las primeras luces del día, las maniobras de desvío y señalización han generado importantes retenciones. Los Mossos d’Esquadra y el Servei Català de Trànsit están aconsejando a los vehículos que se desplacen hacia la A-7 para evitar colapsos mayores.
Bomberos y SEM, presentes
En el lugar del accidente, se han desplazado siete dotaciones de los Bombers con el objetivo de socorrer a las víctimas y estabilizar el camión volcado. Los equipos de rescate confirmaron la existencia de una persona atrapada en el interior de uno de los vehículos. Dado que se trata de un siniestro de gran magnitud, cada minuto es crucial para extraer a los heridos y evaluar el estado de las demás personas implicadas.
Mientras tanto, los servicios médicos han acudido con tres unidades de emergencia para asistir a los accidentados tan pronto sea posible. Sobre las nueve de la mañana, las autoridades han confirmado que el conductor del camión finalmente ha perdido la vida tras el siniestro. Es la decimoquinta víctima mortal en las carreteras catalanas en 2025.
Trànsit ha emitido varios mensajes a través de las redes sociales para avisar de la situación, recordando a los ciudadanos la importancia de evitar la zona si no es absolutamente necesario. También se han instalado paneles informativos en las principales vías de acceso, dirigiendo el flujo de vehículos hacia itinerarios alternativos. Aun así, se espera que las colas y las demoras se prolonguen hasta que la carretera pueda ser reabierta con normalidad.
Una vez finalicen las labores de auxilio y de retirada de los vehículos siniestrados, se procederá a la limpieza de la calzada y a la verificación de su estado. El objetivo es que la AP-7, vital para el tránsito en la región, recupere cuanto antes su operatividad. Sin embargo, hasta que esto suceda, se recomienda a los conductores armarse de paciencia y respetar las indicaciones de los agentes que trabajan sobre el terreno.
Por ahora, según la última actualización, la carretera se mantiene todavía cortada y se están realizando desvíos hacia la A-7. En el otro sentido, el norte, hay un carril cortado que sirve a los servicios de emergencia para trabajar con mayor fluidez.