El incendio que desde hace horas arrasa la zona de Torrefeta i Florejacs, en la comarca de la Segarra, ha superado con creces los límites del término municipal. La intensidad del fuego, unido a un viento cada vez más fuerte, ha generado una gran nube de humo que ya ha alcanzado zonas situadas a más de 60 kilómetros de distancia, como Mollerussa y la ciudad de Lleida.
En estas localidades, los vecinos han comenzado a notar el olor intenso a quemado, acompañado de pequeñas partículas de ceniza que se depositan en las calles y tejados. En cuestión de minutos, la visibilidad ha empeorado de forma notable, obligando incluso a tomar medidas de prevención en espacios públicos.
Desalojos preventivos y cierre de instalaciones
Uno de los ejemplos más evidentes se ha dado en Mollerussa, donde las autoridades locales han decidido cerrar anticipadamente la piscina municipal ante la presencia creciente de humo. Aunque no había fuego cerca, el aire ya resultaba irrespirable para los usuarios, especialmente para niños y personas mayores.

En otras poblaciones, como Agramunt, la llegada del humo ha sido tan repentina como densa. Testigos aseguran que el cielo se oscureció en pocos minutos, como si una tormenta de verano hubiese cubierto el pueblo. Los vecinos se han visto sorprendidos por la magnitud del fenómeno, que ha cambiado por completo la rutina de la tarde.
El incendio ya afecta a más de 1.000 hectáreas
Según han confirmado los Bomberos de la Generalitat, el incendio ha alcanzado ya las 1.000 hectáreas quemadas, una cifra que podría aumentar en las próximas horas debido a las condiciones meteorológicas desfavorables. El viento, lejos de remitir, continúa soplando con fuerza y complica las tareas de extinción.

Los servicios de emergencia siguen trabajando intensamente con medios terrestres y aéreos, aunque las llamas se extienden con rapidez por la vegetación seca de la zona. Los cuerpos de intervención priorizan la protección de núcleos habitados y granjas, mientras se evalúa la necesidad de nuevos desalojos preventivos.
Alerta en comarcas vecinas
La llegada del humo a municipios alejados ha puesto en alerta a otras comarcas catalanas, que temen la expansión del fuego o, al menos, las consecuencias del humo. La Agència de Salut Pública de Catalunya ha recomendado evitar actividades físicas al aire libre en zonas donde la nube de humo esté presente.
Asimismo, se pide cerrar ventanas y puertas, especialmente en hogares donde haya personas con enfermedades respiratorias, niños o personas mayores. Las escuelas y centros de día han recibido también instrucciones para limitar la exposición al aire libre de sus usuarios.
Incertidumbre sobre la evolución del fuego
Por el momento, no hay previsión clara sobre cuándo se podrá controlar el incendio. La prioridad sigue siendo contener el avance de las llamas y garantizar la seguridad de los vecinos. Las autoridades locales están en coordinación permanente con Protección Civil y los cuerpos de emergencias.
Mientras tanto, la población sigue con preocupación el avance del humo. En redes sociales, muchos usuarios han compartido imágenes del cielo cubierto y las cenizas sobre los coches, alertando de que el fuego de Torrefeta ha superado con creces su impacto local.