La meteorología ha vuelto a hacer acto de presencia en las carreteras catalanas, provocando importantes problemas de circulación que han generado una situación caótica durante las primeras horas del día. Las condiciones climáticas adversas han derivado en un incidente que rápidamente se ha convertido en un punto crítico de atención, afectando tanto a conductores particulares como a transportistas.
La causa: granizo y siniestro vial
La mañana del 16 de abril está siendo marcada por la meteorología adversa, con fuertes precipitaciones de granizo que han impactado directamente en la C-61. Concretamente, ha sido cerca de Arenys de Munt donde este inesperado granizo ha dificultado enormemente la circulación, dando lugar a un accidente que ha obligado a cortar el tráfico en ambos sentidos.
Según ha informado el Servei Català de Trànsit (SCT), la combinación de granizo acumulado sobre el asfalto y la baja visibilidad ha provocado un choque de vehículos cuya gravedad aún se encuentra en evaluación por parte de los equipos de emergencia desplazados al lugar.
Retenciones kilométricas
La consecuencia inmediata del incidente ha sido una larga cola de vehículos atrapados en la vía. La circulación se ha visto afectada en un tramo considerable, generando retenciones de aproximadamente tres kilómetros entre las localidades de Arenys y Vallgorguina. Los Mossos d’Esquadra y los servicios de emergencia trabajan intensamente en la zona para despejar el camino y asistir a los afectados por el choque, así como para restablecer cuanto antes la circulación.
No es la primera vez que esta carretera registra problemas por condiciones meteorológicas adversas. En ocasiones anteriores, la combinación de precipitaciones y las características propias del tramo, con curvas pronunciadas y zonas propensas a la acumulación de agua, han convertido esta vía en una de especial atención durante episodios meteorológicos severos.
Por ello, las autoridades recomiendan extremar la precaución al volante durante jornadas con previsión de lluvias intensas o granizo. Mantener una distancia prudencial de seguridad, reducir la velocidad, y asegurarse del correcto estado de los neumáticos son medidas clave para evitar accidentes como el ocurrido en esta ocasión.
Impacto en la movilidad local
El corte de la C-61 ha supuesto un verdadero quebradero de cabeza para numerosos conductores que a diario usan esta carretera para sus desplazamientos laborales o personales entre poblaciones del Maresme y el Vallès Oriental. La alternativa inmediata para muchos usuarios ha sido utilizar rutas secundarias, lo que también ha provocado cierta saturación de tráfico en vías cercanas, algo habitual cuando se produce un corte prolongado en carreteras principales.
Este episodio refuerza la necesidad de estar informado sobre el estado de las vías antes de salir de casa, especialmente en jornadas con condiciones meteorológicas inciertas. Aplicaciones móviles, emisoras locales y servicios oficiales de tráfico se convierten en aliados fundamentales para evitar caer en atascos y situaciones peligrosas.