Una vez más, los conductores han tenido que armarse de paciencia en una de las autopistas más transitadas del territorio catalán. En esta ocasión, un incidente protagonizado por un vehículo pesado ha generado importantes complicaciones de tráfico, con largas filas de coches atrapados durante horas. Pero ¿qué ha ocurrido exactamente?
Los hechos se han producido este martes 15 de abril en la AP-7, una vía clave que conecta diferentes zonas estratégicas en dirección a Tarragona. Según ha informado Trànsit en su cuenta oficial de Twitter, un camión ha sufrido una avería que ha obligado a detener su marcha y estacionarse en el arcén de la autopista.

La avería ha ocurrido concretamente a la altura de Castellví de Rosanes, una localidad que habitualmente soporta un intenso volumen de tráfico, especialmente en horas punta y días laborales. Debido a esta incidencia, se ha tenido que cerrar parcialmente uno de los carriles de la autopista, incrementando considerablemente la congestión.
Retenciones kilométricas
Según fuentes oficiales del Servei Català de Trànsit, la situación ha generado rápidamente retenciones de hasta 8 kilómetros en dirección sur, afectando a centenares de vehículos que se han visto atrapados durante un periodo prolongado. La circulación avanza muy lentamente, generando incomodidad y retrasos a los usuarios.
En la fotografía compartida en redes sociales por las autoridades se puede observar claramente la magnitud del problema, con largas filas de automóviles, camiones y vehículos particulares afectados por la ralentización del tráfico.
Trànsit ha reaccionado inmediatamente tras conocerse el incidente. Se ha desplegado rápidamente un operativo para asistir al camión averiado y restablecer cuanto antes la normalidad del tráfico. Además, se está comunicando constantemente la evolución de la situación a través de redes sociales para mantener informados a los conductores y sugerir alternativas de ruta.
Las autoridades recomiendan a los conductores afectados buscar rutas alternativas para aliviar en lo posible la congestión y evitar aumentar la longitud del atasco. El dispositivo permaneció activo hasta que el vehículo averiado pudo ser retirado y el carril cerrado quedó nuevamente habilitado para su uso normal.
Este incidente vuelve a poner sobre la mesa la vulnerabilidad de la AP-7 ante cualquier inconveniente puntual. Desde que esta vía pasó a ser gratuita en 2021, ha registrado un incremento notable en su tráfico diario, lo que aumenta la probabilidad de atascos ante cualquier pequeña incidencia.
Este tramo de la autopista en particular ya ha protagonizado varios incidentes similares, generando debates sobre la necesidad urgente de mejorar la infraestructura o implementar nuevas medidas para gestionar el volumen de tráfico. Conductores y entidades han pedido reiteradamente actuaciones concretas para minimizar este tipo de inconvenientes, cada vez más habituales.