Comenzaba una nueva semana del mes de febrero en la provincia de Barcelona. Lo hacía, como es habitual, con millones de desplazamientos en sus vías principales, con una gran cantidad de trabajadores arrancando la semana a primera hora del día. Varios de ellos, sin embargo, se toparon con una circulación lenta en varios tramos de las autopistas; y es que algunos incidentes han provocado retenciones en cinco puntos distintos.
Según la información oficial proporcionada por Trànsit, la C-32 a la altura de Mataró, en sentido Barcelona, ha sufrido un accidente que ha forzado el corte de carriles. De los dos kilómetros de atascos iniciales, se ha pasado a retenciones de hasta cuatro o cinco kilómetros, llegando incluso hasta Sant Andreu de Llavaneres. Los equipos de emergencias han intervenido con rapidez, pero la lenta reapertura de la vía ha mantenido el tráfico saturado.
![Un coche de policía con un letrero de emergencias 112 Un coche de policía con un letrero de emergencias 112](/filesedc/uploads/image/post/mossos-desquadrea-112_1200_800.webp)
Otra zona especialmente afectada ha sido la Ronda Litoral, en el tramo que va de Sant Adrià a Montjuïc en sentido Llobregat. Un siniestro ha obligado a cerrar parcialmente la circulación, provocando que numerosos vehículos quedaran atrapados en paradas intermitentes. Los conductores que han intentado desviar su ruta hacia vías secundarias tampoco han tenido demasiada suerte, encontrando complicaciones en accesos y salidas cercanas.
Más accidentes: más retenciones
Por si fuera poco, la C-32 también ha registrado aturadas intermitentes entre Gavà y El Prat, dirección Barcelona, agravadas por el volumen de vehículos habituales en las horas punta. Para completar el cuadro de incidencias, la C-31 se ha sumado al desajuste circulatorio con notables lentitudes entre El Prat y Bellvitge, en el mismo sentido. Muchas personas que confiaban en estas arterias para evitar la congestión se han visto afectadas por la falta de fluidez en la red viaria.
La situación tampoco ha resultado mucho mejor en la AP-7, que ha presentado retenciones intermitentes entre Cerdanyola del Vallès y El Papiol en sentido Tarragona, también a causa de un accidente. Los testigos han reportado frenazos bruscos y colas extensas, generando un efecto dominó para todos aquellos que circulaban hacia el sur. Ante este cúmulo de incidentes, los servicios de emergencia han pedido extrema precaución.
Las autoridades de tráfico, además de recomendar rutas alternativas, han instado a los conductores a conducir con prudencia y a mantenerse informados en tiempo real. Como consecuencia de las diversas colisiones y maniobras de recuperación, los técnicos han habilitado desvíos provisionales, aunque la situación no se ha normalizado con la celeridad deseada. Se han movilizado varias dotaciones policiales para gestionar la circulación y tratar de paliar el colapso.
Veremos cómo va avanzando la evolución en estas arterias a lo largo de la mañana, pero no se prevé que ninguno de estos incidentes vaya a suponer un mal severo. Es decir, que a medida que vayan pasando los minutos, la situación irá mejorando.