La tarde del domingo quedó marcada por un suceso inquietante en Cornellà de Llobregat. Varios agentes se desplazaron a la zona próxima al cauce del río tras recibir una llamada que alertaba de la presencia de un cuerpo. Cuando llegaron, constataron un hallazgo que generó preocupación tanto en la policía como en los vecinos.
El aviso se produjo en torno a las 15.30 h. Una persona aseguraba haber visto un cadáver en una zona de vegetación espesa, de difícil acceso. Hasta allí se trasladaron dotaciones de los Mossos d’Esquadra, la policía local de Cornellà y efectivos del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM). De todo esto ha informado en primicia El Periódico.
Al examinar el cuerpo, se confirmó que pertenecía a una mujer que aparentemente llevaría días muerta. El cadáver no presentaba indicios de criminalidad, tal y como apuntan las primeras informaciones. Las autoridades barajan la posibilidad de que la muerte se produjese semanas atrás.
Esta hipótesis cobra fuerza debido a que la ropa deportiva y el estado del cuerpo sugieren cierta antigüedad en la fecha del fallecimiento. Aun así, los agentes continúan con la investigación para descartar cualquier escenario no contemplado. El informe de la autopsia será la pieza clave para obtener respuestas definitivas.
Dos semanas desaparecida
Las primeras pesquisas señalan que la fallecida podría ser una vecina de 51 años que desapareció el 19 de enero. El Periódico recoge que esta mujer, identificada por sus iniciales S.G.L., fue denunciada como desaparecida por su familia en esas fechas. De confirmarse la identidad, se trataría de un caso con semanas de misterio tras de sí.
Tres días después de la desaparición, la familia contactó con la asociación SOS Desaparecidos para difundir la alerta. Incluso se utilizaron redes de cajeros automáticos para ampliar la búsqueda. Asimismo, la policía catalana lanzó un aviso en sus redes en un intento de recabar pistas sobre el paradero de la mujer.
Ahora, los Mossos d’Esquadra aguardan los resultados de la autopsia. Con ello pretenden comprobar si las fechas de la muerte coinciden con la desaparición denunciada. De momento, la investigación permanece abierta y se mantiene la cautela. Aunque todo indica la inexistencia de un móvil criminal, no se descartará nada hasta que las pruebas forenses arrojen conclusiones claras. Tampoco se ha facilitado información relativa a la causa concreta del fallecimiento.
Los Mossos siguen recabando testimonios e indicios en torno al lugar de los hechos. El complejo acceso a la ribera complica las labores de inspección y el levantamiento de evidencias. Aun así, los agentes continúan trabajando para dotar de certidumbre a este suceso que ha sacudido la calma dominical de Cornellà.