El sector bancario vive una transformación digital acelerada. Fin Techs y gigantes tecnológicos han puesto presión sobre los bancos tradicionales para ofrecer servicios más ágiles, personalizados y seguros. En este escenario, la inversión tecnológica no solo es competitiva, sino esencial para mantenerse vigentes.
En 2024, el grupo Santander destinó aproximadamente 3.600 millones de euros en tecnología y formación, logrando una reducción de 71 puntos básicos en sus costes operativos, es decir, unos 314 millones € menos en el año. Además, la banca con oficinas digitales se consolida como modelo híbrido, con oficinas físicas apoyadas en entornos digitales robustos.
Un dato curioso: la revista The Banker reconoció a Santander como el banco más innovador del mundo en 2023, gracias a su apuesta por plataformas digitales, cajeros inteligentes, aplicaciones móviles y blockchain; Gravity fue señalado como “la joya de la corona”.

Gravity: la nube como núcleo bancario en España
El 19 de junio de 2025, Santander completó la migración del core bancario de España a Gravity, su plataforma nativa en la nube. Este núcleo procesa operaciones esenciales: transferencias, préstamos, depósitos… El cambio no fue menor: se gestionan más de 4.300 millones de transacciones anuales, con picos de hasta 33.000 transacciones por segundo.
El sistema Dual Run, desarrollado por Santander y utilizado en colaboración con Google Cloud, permite operar de forma paralela en mainframe y nube, sin interrupciones, garantizando estabilidad y tiempo real durante la transición. Este enfoque fue clave para proteger la continuidad operativa y asegurar la eficiencia del proceso.
¿Qué implica operar al 100 % desde la nube?
Agilidad y reducción de tiempos
Antes de Gravity, desplegar nuevas funcionalidades podía tomar semanas. Ahora, se lanza en tan solo horas, gracias a un acceso instantáneo a datos y un entorno de desarrollo moderno santander.com. La aplicación móvil también se actualiza con mucha mayor frecuencia, lo que mejora la experiencia del usuario.

Eficiencia energética y costes operativos
Uno de los beneficios más destacados es una reducción del 70 % en el consumo energético de su infraestructura tecnológica. A su vez, en 2024 el coste de transacción del core bancario cayó un 19 %, lo que respalda el impacto económico directo de Gravity.
Apuesta por talento y escalabilidad
Santander involucra a más de 1.200 profesionales en la implantación de Gravity en España. Todos los equipos técnicos ahora trabajan en una plataforma de desarrollo ágil y automatizada, que atrae a desarrolladores y genera sinergias globales. El sistema está diseñado para extenderse a Brasil y México, completando el 80 % de la migración global del core bancario del grupo.
Posicionamiento estratégico: apuesta por la tecnología
La internalización de Gravity coloca a Santander como referente en el sector, a la altura de empresas nativas digitales santander.com. Además, gracias a una licencia concedida a Google, se ha creado el servicio Dual Run, que ya generó ingresos de unos 25 millones de dólares en 2024.
La estrategia “One Transformation” busca estandarizar plataformas, modelos operativos y servicios para los 173 millones de clientes del grupo. El objetivo es claro: reducir costes, acelerar el tiempo de mercado y mejorar la experiencia del cliente en todos los mercados.

Claves de un cambio disruptivo
La migración total del core bancario a la nube no es habitual en entidades. Santander, al hacerlo en España, da un paso pionero en occidente. El impacto es tangible: más eficiencia operativa, menor huella energética, mayor velocidad de innovación, y una experiencia de cliente notablemente superior.
Queda claro que la llegada de Gravity al 100 % en España supone un antes y un después en la estrategia de Santander. No es solo un cambio técnico, sino un paso estratégico hacia una banca moderna, sostenible y centrada en el cliente, con una plataforma global y capacidad de adaptación acelerada. El reto ahora será mantener esta ventaja tecnológica a nivel global, integrándola en otros mercados clave, sin perder la calidad ni la seguridad del servicio.