Hombre mayor con micrófono de diadema en primer plano y una mano insertando una tarjeta en un cajero automático al fondo

Aviso urgente de un multimillonario sobre el futuro de la economía

Según él, el futuro no pinta bien

Comenzamos este informe situando el escenario actual: la economía mundial enfrenta una convergencia de tensiones inéditas. La deuda pública de  Estados Unidos  alcanzó en 2024 un déficit de 1,83 billones USD. Al mismo tiempo, se observa una creciente fragmentación de los flujos comerciales y un giro hacia políticas proteccionistas —como los nuevos aranceles de EE. UU.— que están afectando las cadenas de suministro. Estos elementos remiten a situaciones históricas previas, con ecos de los años treinta y la crisis financiera de 2008.

En este contexto, Ray Dalio, fundador de Bridgewater Associates, ha lanzado una advertencia al más puro estilo médico: “algo peor que una recesión” podría desatarse si no se toman decisiones fiscales y comerciales responsables.

La amenaza de una ruptura en el orden monetario

Dalio sitúa el problema en la intersección de cinco fuerzas: deuda, aranceles, cambio en el orden mundial, tensiones internas y tecnológicos, junto a eventos naturales como pandemias. Advierte que los aranceles proteccionistas —la imposición de alzas que en algunos casos alcanzan el 145 % para productos chinos— actúan “como piedras lanzadas al sistema productivo”. En su visión, esto podría derivar en una “ruptura del orden monetario”, con una devaluación del dólar y un debilitamiento del sistema internacional.

Un hombre pensativo en una sala de cajas de seguridad.
Persona pensativa en un banco | Viktor Gladkov, PhonlamaiPhoto's Images, XCatalunya

Simultáneamente, el déficit fiscal estadounidense, que rondaría hasta un 7 % del PIB sin reformas, genera presiones sobre los mercados de deuda. Si no se reduce a un nivel sostenible –3 % como sugiere Dalio–, los tipos de interés podrían repuntar y desencadenar una situación muy grave. 

Riesgos sistémicos: desde política interna a conflictos globales

El aviso es claro: esto no es solo un riesgo económico, sino también político y geopolítico. Dalio menciona posibles fracturas dentro de la democracia, aumento de tensiones internas e incluso escalada internacional con efectos militares. Remite al colapso de los años treinta, cuando se produjo una espiral de crisis financieras y agresiones entre potencias.

Este esquema se agrava si los aranceles y la deuda se manejan de forma caótica. Sin embargo, Dalio también destaca que existe una posibilidad de corregir el rumbo. Propone un ajuste racional: reducción del déficit, acuerdos globales razonables (como valorización del renminbi) y negociación estratégica con China, en lugar de enfrentamientos desordenados.

Un hombre sonriente con camiseta blanca hace un gesto de aprobación con ambas manos frente a un mostrador de Deutsche Bank.
Montaje en el que se ve una persona en una oficina | Dean Drobot, XCatalunya, Deutsche Bank

Hay que tomar medidas

La advertencia de Dalio no es alarmista, sino una llamada a la acción. Su trayectoria, que incluye anticipar la crisis financiera de 2008, añade credibilidad a su visión actualidad. En su opinión, estamos en un punto de inflexión decisivo: o se actúa con disciplina fiscal y diplomacia estratégica, o enfrentaremos una crisis profunda, que podría superar en gravedad a cualquier recesión.

Para los responsables de política económica —gobiernos, bancos centrales y legisladores—, es imprescindible retomar los niveles de déficit como en los noventa, diseñar rutas de negociación internacional y reducir el riesgo de desestabilización monetaria. Solo así se podrá evitar que la próxima gran crisis se convierta en realidad.