La actriz de la localidad barcelonesa de Molins de Rei, Sílvia Bel, es una de las estrellas de la audiencia de TV3 gracias al éxito de Com si fos ahir, donde interpreta a Marta. Prestigiosa intérprete de la escena catalana, convertida en una habitual de los montajes del TNC, es la exesposa de uno de los actores más mediáticos del cine español.
Carlos Elejalde Garay, más conocido como Karra Elejalde es uno de los actores más admirados del cine de las últimas cuatro décadas. El actor vasco es el flamante ganador de 2 Premios Goya, obtenidos gracias a sus interpretaciones como mejor actor de reparto por También la lluvia (Icíar Bollaín, 2010) y Ocho apellidos vascos (Emilio Martínez Lázaro, 2014), y además ha sido candidato en dos ocasiones más, por 100 metros (Marcel Barrena, 2016) y Mientras dure la guerra (Alejandro Amenábar, 2019), la única vez en la que ha sido finalista como actor protagonista.
La magia del cine
Sílvia Bel y Karra Elejalde se conocieron el año 2000 durante el rodaje de Año mariano, que Karra codirigió junto a Fernando Guillén Cuervo y en la que Sílvia era una de sus protagonistas. Su conexión fue inmediata, posteriormente se casaron y tuvieron una hija, Ainara Elejalde. A sus 23 años, Ainara ha seguido los pasos de sus padres, y este año ha entrado a lo grande, pues ha conseguido ser nominada a un Premio Gaudí por su debut en el cine, con el film Els encantats, de Elena Trapé.
En 2004, Sílvia y Karra repetirían la experiencia previa de Año mariano, con la siguiente película dirigida por él, otra alocada comedia de título Torapia. Su amor por Sílvia provocó que el actor y director se estableciese en Catalunya, y más concretamente en la citada localidad natal de Sílvia, Molins de Rei, donde todavía mantiene su residencia parcial. Una vez justificó de esta forma su establecimiento catalán: "Me enamoré de la actriz Sílvia Bel y tuve una hija. Llevo aquí ya 15 años. Si vivo en el País Vasco, no hay manera de disfrutarla". Aunque ya llevan divorciados muchos años, su relación ha marcado un punto de inflexión en sus respectivas vidas.
De carácter fuerte e intransigente, Elejalde es un actor visceral y camaleónico, capaz de asumir cualquier reto interpretativo. Una de sus principales aficiones es la cocina, en la que también aboca esa pasión tan contagiosa con la que afronta todas sus decisiones: "Tenemos un txoko en Molins de Rei y cocino cuando puedo entre rodaje y rodaje. Tengo muy buena ayuda, porque conozco a muchos cocineros. Una vez hice un jabalí y me quedó demasiado fuerte así que llamé a Karlos Arguiñano y me recomendó que pusiera un par de castañas y compota de manzana. Triunfé con ese consejo porque el jabalí quedó rico, rico".