Desde su controvertido “Megxit” en enero de 2020, Meghan Markle y el príncipe Harry se han mantenido bajo el ojo público, explorando nuevos proyectos en EE. UU. Ahora, con la inminente llegada del príncipe Guillermo al trono, surge una nueva controversia: ¿qué pasará con sus títulos reales? Esta historia combina lealtad, protocolos y tensiones familiares en un momento clave para la monarquía.
¿Qué ha pasado?
Toda la polémica gira en torno al uso reciente del tratamiento “HRH” (“Su Alteza Real”) por parte de Meghan. Este controvertido gesto incluyó una nota en una canasta enviada a una amiga en la que figuraba “HRH The Duchess of Sussex”, y también una carta pública de una figura diplomática ucraniana dirigida a ella con el mismo tratamiento.
Tales actitudes contrastan claramente con el acuerdo de 2020, conocido como el "Sandringham Agreement", donde se pactó que dejarían de usar el título “HRH” para marcar su alejamiento como miembros activos de la familia real.

En abril de 2025, medios como The Daily Beast y Page Six informaron que Guillermo, cada vez más irritado por estas acciones, tiene decidido eliminar el tratamiento HRH, tan pronto suba al trono. Se describe su actitud como una acción inmediata y simbólica para restablecer límites protocolarios.
De momento sólo hay silencio
Desde palacio, Buckingham y Kensington han evitado pronunciarse de forma directa. Sin embargo, fuentes cercanas confirman que el compromiso de no usar el estilo HRH —acordado con la reina Isabel II— sigue vigente, y que la reciente actuación de Meghan ha roto ese acuerdo tácito.
Consultados medios como People y expertos en derecho real indican que, legalmente, el soberano puede retirar el estilo HRH sin necesidad de intervención parlamentaria, ya que es un honor conferido a discreción. No obstante, privarles del ducado del Sussex o del título de príncipe requeriría una ley aprobada por el Parlamento, un trámite complejo que todavía no ha ocurrido.

Mientras tanto, medios estadounidenses hablan de “una urgencia renovada”: la entrevista de Harry en la BBC, donde cuestionó la salud del rey Carlos III, desató presiones adicionales sobre Guillermo para tomar medidas definitivas. En redes y programas como The View, se critica la supuesta instrumentalización de su vínculo real: “Meghan está usando el título para su beneficio”.
Legalmente, ¿se puede hacer?
Los expertos coinciden en que eliminar el estilo HRH es, en teoría, sencillo: basta con un decreto real. En cambio, despojar a Harry del ducado de Sussex o del título de príncipe implica legislación parlamentaria, un proceso muy poco frecuente y que requeriría gran consenso político. En 2022 incluso se debatió una ley al respecto, “Removal of Titles Bill”, que nunca se aprobó people.com. Esto explica por qué pese a los rumores, hasta ahora siguen conservando oficialmente esos títulos.
Origen del problema
En enero de 2020, Harry y Meghan anunciaron su retirada oficial de la realeza mediante redes sociales, dejando en claro que ya no usarían HRH y que buscarían independencia financiera. A cambio, conservaron sus duques de Sussex y una posición mediática única. Desde entonces, Meghan ha lanzado varios proyectos como su serie With Love, Meghan, la marca “As Ever” y su podcast Archetypes, mientras Harry se ha centrado en los Invictus Games y un documental sobre polo.

Para algunos, esto confirma que siguen “aprovechando” su vínculo con la corona; para otros, es su intento de redefinirse sin dejar por completo su legado.