Desde su llegada a Montecito, Harry y Meghan han encontrado un ritmo de vida que les permite priorizar lo más importante: su familia. Para ellos, cada día junto a Archie y Lilibet es una oportunidad de crear recuerdos sinceros, alejados de las formalidades que una vez los rodearon.
Aunque protegen la intimidad de sus hijos, de vez en cuando comparten pequeñas pinceladas de su día a día. Esos momentos espontáneos muestran una faceta cercana de los Sussex, donde los gestos sencillos se transforman en instantes memorables.

Lilibet, la pequeña estrella que sigue los pasos de su madre
Uno de esos momentos se vivió con el lanzamiento de As Ever, la marca de Meghan. En un video, Lilibet aparece de la mano de su madre, mostrando una naturalidad que enamoró a todos.
Meghan reveló que involucrar a Archie y Lili en sus proyectos era una forma de enseñarles el valor del esfuerzo. “Archie hizo la clausura de rodaje”, contó con orgullo, destacando lo especial que fue tener a sus hijos cerca.
La conexión de Lilibet con la naturaleza también forma parte de su educación. Meghan explicó en su pódcast cómo organizan un pequeño mercado de agricultores en su comunidad, enseñando a los niños que todo tiene un valor y un esfuerzo detrás.

Harry y su familia celebra lo cotidiano con emoción
Para Harry y Meghan, no son necesarias las grandes ocasiones para crear momentos inolvidables. Las manualidades de San Valentín o las tardes de repostería se han convertido en tradiciones familiares.
En una de esas sesiones, Meghan fue captada dándole un beso a Archie mientras Lilibet ayudaba con la mezcla de galletas. Son instantes de felicidad que la pareja disfruta compartir de forma discreta.
Harry siempre ha defendido la importancia de dar a sus hijos una infancia libre y sencilla. Paseos en la playa, juegos en el jardín y tardes de cuentos son parte de la rutina que han elegido como familia.

El rumor que confirma el orgullo de Harry
Durante meses, se comentaba entre los seguidores de la realeza que la pequeña Lilibet Diana había heredado el carácter fuerte y carismático de su abuela, la princesa Diana. Meghan y Harry han mantenido una vida discreta para sus hijos. Aunque las imágenes y momentos que han compartido confirman lo que muchos sospechaban.
Lilibet tiene un espíritu vibrante, espontáneo y libre, muy similar al de Lady Di. Harry, visiblemente emocionado, no duda en reconocer ese parecido. “Es una niña con un espíritu libre, y verla crecer de esa manera nos llena de orgullo”, afirmó en una reciente conversación.
Cada gesto de Lilibet, desde sus travesuras en casa hasta su desparpajo en Disneyland, refleja esa chispa especial en la niña. Algo que tantos recuerdan de Diana, convirtiendo ese rumor en una certeza que Harry y Meghan viven con felicidad.