El príncipe Guillermo, heredero al trono británico, ha sido sorprendentemente excluido del testamento de su tío político, Lord Robert Fellowes, quien falleció en julio de 2024. La herencia, valorada en más de 1,5 millones de libras esterlinas (aproximadamente 1,8 millones de euros), ha sido legada en su totalidad a su esposa, Lady Jane Fellowes, hermana mayor de la princesa Diana, y a diversas instituciones benéficas.
Entre las donaciones destacan aportes al Eton College, alma mater de los príncipes Guillermo y Harry, así como a un hospicio local y a la iglesia de Santa María, donde se celebró el funeral del difunto.
La exclusión de Guillermo y su hermano Harry del testamento ha generado sorpresa y especulaciones en el Reino Unido, dado el estrecho vínculo familiar que compartían con Lord Fellowes, quien fue secretario privado de la reina Isabel II durante la década de 1990.
Aunque no se han ofrecido explicaciones oficiales sobre esta decisión, algunos analistas sugieren que podría deberse a la intención de mantener el legado dentro del núcleo familiar más inmediato o a decisiones personales del difunto.
Un funeral marcado por la tensión entre hermanos
La publicación del testamento coincide con el recuerdo del funeral de Lord Fellowes en agosto de 2024, última ocasión en que los príncipes Guillermo y Harry fueron vistos juntos en público. La ceremonia, celebrada en la iglesia de Santa María, estuvo marcada por la evidente tensión entre los hermanos, quienes se sentaron separados y evitaron cualquier interacción.
El experto en realeza y excorresponsal de la BBC, Michael Cole, describió el ambiente como "frío" y señaló que "si Harry pensó que su aparición repentina en Inglaterra serviría para acercarlo a su hermano, se llevó una gran decepción".
Este distanciamiento entre los hijos del rey Carlos III se ha visto agravado en los últimos años por diversas controversias, incluyendo las declaraciones públicas de Harry y su esposa Meghan Markle sobre la familia real, así como su decisión de establecerse en Estados Unidos. La exclusión de ambos hermanos del testamento de su tío podría interpretarse como un reflejo de estas tensiones familiares persistentes.
Debate público en el seno de la monarquía británica
La decisión de Lord Fellowes de excluir a los príncipes Guillermo y Harry de su herencia ha generado un debate público sobre las relaciones internas de la familia real británica. Mientras algunos consideran que se trata de una elección personal del difunto, otros interpretan la medida como un indicio de las fracturas existentes dentro de la monarquía.
En un contexto donde la imagen de la familia real es objeto de constante escrutinio, este episodio añade una nueva capa de complejidad a la narrativa pública de los Windsor. La exclusión de los príncipes de una herencia significativa, sumada a las tensiones evidenciadas en eventos familiares, plantea interrogantes sobre la cohesión y el futuro de la institución monárquica en el Reino Unido.
Una decisión que podría cambiar la historia
La exclusión de Guillermo y Harry del testamento de su tío podría representar un punto de inflexión en sus respectivas trayectorias dentro de la familia real. Para Guillermo, quien continúa asumiendo responsabilidades como heredero al trono, este episodio podría reforzar su determinación de mantener una imagen pública centrada en el deber y la estabilidad institucional.
Para Harry, la decisión podría consolidar su distanciamiento de la familia real y su enfoque en proyectos personales y causas benéficas desde su residencia en Estados Unidos.