Letizia Ortiz y Paloma Rocasolano con expresiones serias, una en primer plano y otra en un círculo rojo sobre un fondo urbano al atardecer.

La información sobre la reina Letizia que dejará sin palabras a Paloma Rocasolano

La faceta desconocida de la reina Letizia que ha impresionado profundamente a su madre, Paloma Rocasolano

La reina Letizia ha vuelto a ser protagonista por un gesto que deja ver una faceta poco conocida de su personalidad. La información sobre su comportamiento con los más pequeños ha sorprendido incluso a quienes la conocen desde hace décadas. Su madre, Paloma Rocasolano, sería de las primeras en quedarse sin palabras al ver cómo actúa Letizia en determinadas situaciones.

Acompañada del rey Felipe, Letizia ha visitado varias de las zonas más afectadas por los incendios que han marcado este verano. Allí se ha reunido con autoridades locales y vecinos, interesándose de primera mano por las consecuencias de los siniestros. Sin embargo, lo más llamativo ha sido su manera de interactuar con los niños que se encontraban entre los vecinos afectados.

Varias personas observan el paisaje montañoso al aire libre en un día soleado
Letizia y Felipe durante su visita a las zonas afectadas por los incendios | Instagram, @casareal.es

La sorpresa es mayor cuando se recuerda la reputación que Letizia ha cultivado a lo largo de los años. “Tiene fama de ser muy estricta y controladora con sus hijas en cuanto a su formación y protocolo”, explicaba Cristian Salomoni, experto en lenguaje no verbal, en MujerHoy. Aun así, durante estas visitas se ha demostrado lo contrario, ya que la reina Letizia se ha mostrado cercana, cariñosa y completamente entregada a los pequeños, dejando a todos boquiabiertos.

La faceta de la reina Letizia que emociona incluso a su madre, Paloma Rocasolano

Cada vez que Letizia se encuentra rodeada de niños, su emoción se hace evidente. Los coge en brazos, les escucha atentamente y se deja fotografiar con ellos, demostrando una espontaneidad que pocas veces se ve en actos oficiales. Incluso en medio de situaciones difíciles, como la visita a zonas devastadas por los recientes incendios, la reina ha logrado arrancar sonrisas y alivio a quienes la rodean.

A pesar de esta faceta cariñosa, Letizia sigue mostrando firmeza con sus hijas, especialmente con la princesa Leonor. La futura reina recibe indicaciones claras y constantes sobre cómo actuar en eventos oficiales, mientras que Sofía disfruta de un trato más informal. Esto demuestra que Letizia combina autoridad y afecto según las necesidades de cada hija, manteniendo un equilibrio que muchos desconocen.

La reina Letizia sonriente saluda a un grupo de personas detrás de una cinta de seguridad en un evento al aire libre, mientras Felipe VI y más asistentes observan la escena.
Letizia brinda consuelo y sonrisas a los niños en su visita | Europa Press

La información que ha sorprendido a Paloma Rocasolano radica precisamente en este equilibrio. Aunque Letizia es percibida como estricta y controladora, su lado más personal emerge con los niños y en situaciones de vulnerabilidad. Su capacidad para transmitir afecto y cercanía sin perder la firmeza demuestra una educación basada en respeto, responsabilidad y sensibilidad.

La reina Letizia combina rigor institucional con una atención genuina a los más pequeños

Durante las visitas a Castilla y León, Galicia y Extremadura, la reina ha recorrido zonas devastadas y ha dedicado tiempo a conversar con cada niño. Las imágenes de su interacción con los más pequeños reflejan ternura, paciencia y un cuidado genuino que sorprende a todos los presentes. Incluso en momentos difíciles, su cercanía con los niños resalta como su prioridad emocional.

Por último, Letizia ha demostrado que su rol como madre y su papel como reina pueden coexistir sin contradicciones. Sus hijas siguen siendo su principal preocupación y su atención a los niños evidencia que su afecto no se limita al entorno familiar. Esta faceta de Letizia deja claro que su capacidad de empatía y cercanía es genuina, un detalle que, sin duda, sorprendería a su propia madre.