Montaje de fotos de primer plano de Pablo Urdangarin y la infanta Cristina, ambos con expresiones serias y un ícono de advertencia rojo entre ellas.

Infanta Cristina (60 años), señalada: su hijo, Pablo Urdangarin, ya lo ha confesado

La infanta Cristina vuelve al foco mediático tras las declaraciones recientes de su hijo Pablo Urdangarin

La infanta Cristina (60 años) ha vuelto a estar en el centro de la atención mediática tras unas recientes declaraciones de su hijo, Pablo Urdangarin. El joven, que sigue los pasos de su padre, Iñaki Urdangarin, ha hablado con sinceridad sobre el papel que desempeña su madre en su vida. Pablo no solo ha confesado cómo Cristina le apoya, sino que también ha dejado claro la relación cercana y el respaldo que recibe de ella.

Pablo Urdangarin, jugador del Fraikin Granollers y promesa del balonmano español, ha concedido una entrevista a EFE en la que reconoce que su madre es su "mayor fan". Durante sus partidos, Cristina no falta a la grada, mostrando un apoyo constante que ha sido decisivo para el joven. Este gesto de cercanía ha fortalecido la imagen pública de la infanta, señalada en ocasiones previas, pero ahora reconocida como un pilar clave en la carrera deportiva de su hijo.

Un grupo de personas está sentado en las gradas de un evento deportivo, algunas aplauden mientras otras parecen conversar o mirar hacia el frente.
La infanta Cristina, siempre presente en las gradas | Europa Press

En sus declaraciones, Pablo ha destacado que la infanta no solo le apoya en el ámbito deportivo, sino también en asuntos personales fuera de la cancha. Además, subraya la complicidad que mantiene con la novia, Johanna Zott, lo que confirma un ambiente familiar unido. Esta relación estrecha con Cristina aporta una imagen diferente a la que suelen proyectar los medios sobre la hermana de Felipe VI.

Pablo Urdangarin y sus padres: entre el legado de Iñaki y el apoyo de la infanta Cristina

Por otra parte, el joven deportista ha reconocido también la influencia de su padre, Iñaki Urdangarin, quien fue una leyenda en el balonmano. Sin embargo, Pablo insiste en que prefiere no ser comparado constantemente con él, aunque comprende que la comparación es inevitable. El exjugador sigue siendo para Pablo un modelo y un apoyo constante, presente en cada entrenamiento y partido, pero el joven quiere forjar su propia identidad deportiva.

Pablo Urdangarin con uniforme negro se prepara para lanzar el balón mientras otros jugadores están sentados en el banquillo.
El joven talento del balonmano, Pablo Urdangarin, en acción | Europa Press

A sus 24 años, Pablo Urdangarin ya ha conseguido reconocimientos destacados, como ser nombrado MVP de la liga Asobal el pasado marzo. Este logro supone un espaldarazo a su trayectoria y una muestra de que el apellido Urdangarin sigue presente en el deporte de élite. Ahora, con la renovación de su contrato, Pablo se prepara para una temporada que podría ser decisiva en su consolidación.

El respaldo de la infanta Cristina impulsa las metas deportivas de Pablo Urdangarin

El joven también ha expresado sus aspiraciones con humildad, manifestando su deseo de debutar pronto en la selección española. Reconoce que quiere seguir los pasos de su padre pero sin prisas, prefiriendo avanzar con calma y dedicación. De este modo, Pablo muestra madurez y responsabilidad en sus metas deportivas, dejando claro que el legado familiar es importante, pero que su propio camino es la prioridad.

La infanta Cristina abraza a Pablo Urdangarin que lleva una camiseta con el nombre
El apoyo incondicional de Cristina durante los partidos de su hijo | Europa Press

En definitiva, las confesiones de Pablo Urdangarin han arrojado luz sobre la figura de la infanta Cristina, quien aparece ahora como un apoyo incondicional en la vida de su hijo. Lejos de los escándalos y polémicas que han rodeado a la familia, este testimonio ofrece una imagen más cercana. Así, la relación entre madre e hijo se posiciona como un elemento clave en la nueva etapa deportiva y personal de Pablo.