Tras cinco años de discreta residencia en Abu Dabi, el rey emérito Juan Carlos I ha decidido cerrar este capítulo de su vida y trasladarse a Portugal, país que ha escogido como su destino final. A sus 88 años, el monarca busca un lugar más cercano a España para pasar sus últimos días, aunque sin regresar a su tierra natal.
Una huida de cinco años
En agosto de 2020, Juan Carlos I abandonó España en medio de investigaciones por presuntas irregularidades financieras, estableciéndose en Abu Dabi. Durante su estancia en la isla privada de Zaya Nurai, disfrutó de una vida de lujo, pero también de soledad y limitaciones físicas.
Con el paso del tiempo, su salud ha ido deteriorándose, y la distancia con su familia y amigos en España se ha hecho cada vez más difícil de sobrellevar.

Ahora, el emérito ha decidido trasladarse a Portugal, específicamente a zonas como Cascais o Estoril, lugares que ya acogieron a miembros de la familia Borbón durante el franquismo y donde él también residió en su juventud.
Esta decisión le permitirá estar más cerca de sus hijas y amigos afincados en territorio español, facilitando los continuos viajes a Sanxenxo y las revisiones médicas en Vitoria.
Reacciones a la noticia
Aunque no ha habido un comunicado oficial por parte de la Casa Real, fuentes cercanas al monarca han confirmado su intención de establecerse en Portugal. Sin embargo, su hijo, el rey Felipe VI, ha puesto condiciones para no oponerse al traslado, como la retirada de la demanda contra Miguel Ángel Revilla. Las negociaciones entre padre e hijo no han sido fáciles, y ambos han mostrado posturas firmes en sus respectivas posiciones.

La elección de Portugal como destino final también ha generado debate en torno a las implicaciones fiscales de su fortuna. Al establecer su residencia en un país de la Unión Europea, Juan Carlos I podría enfrentarse a nuevas obligaciones fiscales y a un mayor escrutinio sobre el origen de sus bienes.
Mientras tanto, el rey emérito continúa trabajando en sus memorias, tituladas "Réconciliation", que se espera sean publicadas próximamente. En ellas, abordará aspectos de su vida personal y profesional, incluyendo su papel en la transición democrática de España y los errores cometidos durante su reinado.
Destino peninsular
La decisión de Juan Carlos I de trasladarse a Portugal marca un nuevo capítulo en su vida, alejándose del exilio dorado en Abu Dabi para acercarse a sus raíces y a su familia. Sin embargo, las tensiones con la Casa Real y las cuestiones fiscales aún por resolver podrían complicar su retiro en tierras lusas.

¿Será Portugal el refugio definitivo para el rey emérito, o surgirán nuevos obstáculos en su camino hacia una vida más tranquila y cercana a su entorno familiar? Teniendo en cuenta los antecedentes familiares, todo puede pasar.