El Rey Emérito Juan Carlos I lleva años enfrentando problemas de salud que han marcado sus últimos años de vida pública. Desde su abdicación en 2014, el monarca ha estado en el centro de numerosas noticias debido a sus delicadas operaciones.
A lo largo de este tiempo, ha sido sometido a diversas intervenciones quirúrgicas que han dejado ver el progresivo deterioro de su estado físico. En 2020, su marcha a Abu Dabi aumentó la especulación sobre su salud y su posible desenlace.
Aunque se mencionó como una decisión estratégica, muchos vieron este traslado como una forma de mantener privacidad ante su frágil condición. Los rumores sobre sus últimas voluntades han sido constantes, con especial atención en dónde reposarán finalmente sus restos mortales.
El misterio del entierro: una incógnita constante
Desde su salida de España, la pregunta sobre dónde será enterrado ha generado controversias y opiniones enfrentadas. El Panteón de Reyes del Monasterio de El Escorial, tradicional para los monarcas, está lleno.
Esta falta de espacio ha planteado múltiples escenarios que han mantenido la atención mediática y política. El entierro de un monarca no es solo un acto familiar, sino también un hecho de enorme simbolismo nacional.
El plan para Juan Carlos: una nueva cripta
Según ha confirmado Monarquía Confidencial, el entierro de Juan Carlos I tendrá lugar en una cripta especial diseñada exclusivamente para él en El Escorial.
Este espacio, que conectará con la actual cripta de los Reyes, está en los planes de Patrimonio Nacional desde hace años. Los diseños preliminares muestran una estructura subterránea, moderna y simbólica que se adapta a las limitaciones de espacio.
Una obra marcada por el legado de Juan Carlos
El diseño de esta nueva cripta no solo responde a la falta de espacio en el Panteón Real. Busca además representar el supuesto legado de Juan Carlos I como figura clave de la transición democrática en España. En su día, el propio Rey Emérito debatió opciones y mostró interés en mantener el Monasterio de El Escorial como lugar de descanso eterno.
La decisión también asegura que su entierro siga las tradiciones de la monarquía española. Fuentes cercanas han confirmado que Patrimonio Nacional ya posee los planos de esta nueva cripta. El objetivo es un diseño que combine tradición y modernidad.
Incluso se planteó crear un espacio arquitectónico único que representara una nueva era de la monarquía. Este concepto recuerda iniciativas icónicas como el Guggenheim en Bilbao o la pirámide del Louvre.
El testamento como pieza clave
La decisión final sobre el destino de los restos del Rey Emérito Juan Carlos I se tomará tras la lectura de su testamento. Su última voluntad incluirá detalles sobre su entierro, pero todo apunta a que El Escorial será su última morada.