Pep Guardiola siempre ha sabido cómo mantener la atención, pero su última transformación ha desatado un auténtico terremoto en redes. El entrenador del Manchester City apareció recientemente sin su emblemática barba, mostrando únicamente un enorme bigote. Este giro estético no pasa desapercibido en un momento clave para su trayecto profesional.
El cambio antes de la pretemporada
En Barcelona, ciudad a la que Guardiola regresa con frecuencia por motivos personales y profesionales, el técnico sorprendió al dejar atrás su clásica barba y lucir únicamente un bigote. Su nuevo aspecto no tardó en circular por Instagram y X, generando una oleada de comentarios. A sus 54 años, el entrenador decide reinventarse justo antes del retorno al trabajo con el City. Diversos periodistas deportivos compartieron fotografías del momento, confirmando que la barba ha dado paso a un bigote prominente.
Este cambio coincide con el inicio de la nueva temporada 2025/26, justo después de que el City completara un año sin títulos importantes por primera vez en su era en Inglaterra. El equipo terminó tercero en la Premier League y fue eliminado prematuramente en varias competiciones clave.

Humor, comparaciones y expectación
La reacción fue inmediata y los fans no tardaron en presumir de ingenio. Comentarios como “La Premier League debería estar temblando ahora” o “No se puede anunciar que Pep Guardiola tiene bigote y esperar que lo asimilemos con normalidad” inundaron las redes. Algunos incluso lo compararon con Ted Lasso, serie donde Guardiola ya hizo un cameo.
En Instagram, la encuesta del Diario Olé fue un festival. Afiliados lanzaron respuestas divertidas asociando al bigote de Guardiola con personajes icónicos. Quique Guasch, Mr. Proper, e incluso un actor de cine para adultos fueron algunos de los candidatos. Todo en tono jocoso, pero con un fondo de cariño que respondía a la sorpresa fruto del cambio de look.
Entre salud, negocios y estética
Guardiola fue fotografiado sin barba en una visita a la Clínica Monarka en Barcelona, centro del que es accionista y que se enfoca en bienestar físico y mental. El detalle del cambio estético encaja con un nuevo capítulo personal. Su reciente divorcio y el empeño en rejuvenecer tras una temporada difícil, parecen ser la causa de su cambio de look. Se expresaba así en una entrevista con GQ: “Estoy hecho una castaña… como si tuviera 75 años”.

Esta transformación puede leerse también como una declaración simbólica: dejar atrás la barba que le acompañó años, y adoptar un estilo que sugiera frescura y fuerza renovada.
Mientras los fichajes aterrizan y el City afronta su pretemporada contra Palermo y Wolves, muchos seguidores han enlazado el bigote con un deseo de revancha. La temporada llega cargada de expectativas y el entrenador se muestra dispuesto a liderar desde la originalidad. El cambio físico ha dejado paso a un interés renovado por su figura.