El verano se complica en el Carlos Tartiere. La ilusión del regreso a Primera se ha visto salpicada por las dificultades del mercado y la competencia global por los grandes nombres. Agosto, lejos de ser un mes de buenas noticias, ha traído dos varapalos consecutivos para la dirección deportiva y el cuerpo técnico. El Real Oviedo, que había conseguido ilusionar a la afición con la posible llegada de jugadores de perfil internacional, se topa una vez más con la realidad económica de los clubes españoles frente a gigantes del fútbol global.
El fichaje de Nemanja Maksimovic era una prioridad absoluta en la hoja de ruta oviedista. El mediocentro serbio, que todavía pertenece al Panathinaikos, tenía el visto bueno de Veljko Paunovic, que ha tratado de convencerle durante semanas. Sin embargo, en los últimos días el mercado ha dado un giro radical. Una oferta millonaria llegada desde Catar ha tumbado cualquier esperanza de verle de azul esta temporada, según La Voz de Asturias.
La propuesta catarí se acerca a los 10 millones de euros, una cifra inalcanzable para el Real Oviedo y para la mayoría de clubes europeos fuera del círculo de la élite. El interés de los jeques, sumado a la eliminación europea del Panathinaikos, han acelerado una operación que parecía dormida. Ahora, el futuro de Maksimovic apunta con fuerza al fútbol de Oriente Medio, dejando al conjunto carbayón con un vacío en la medular. Tanto al club griego como al futbolista serbio les seducen los petrodólares cataríes.

Jovic, el precedente reciente: dos decepciones consecutivas en el mercado oviedista
La historia se repite con demasiada crudeza para el Oviedo. Hace apenas unos días, Luka Jovic, otro serbio con pasado de estrella, estuvo muy cerca de convertirse en el gran golpe del verano. El delantero estuvo muy cerca de convertirse en carbayón, pero finalmente decidió firmar por el AEK Atenas. La oferta deportiva y económica de Grecia resultó decisiva, frustrando un sueño que estuvo más cerca que nunca de convertirse en realidad.
Ahora, el caso Maksimovic no solo recuerda el desenlace de Jovic, sino que evidencia las dificultades crecientes para competir con las grandes ligas y los mercados emergentes. El Real Oviedo, a pesar del apoyo del Grupo Pachuca y la ambición del cuerpo técnico, debe moverse con agilidad en un mercado cada vez más imprevisible y volátil.
La dirección deportiva del Oviedo busca alternativas de urgencia y reconfigura la estrategia de fichajes
La prioridad ahora pasa por encontrar un mediocentro de garantías que permita apuntalar una plantilla que quiere mirar a la zona alta de la tabla. Tanto Paunovic como el equipo de trabajo de la dirección deportiva llevan semanas rastreando el mercado en busca de perfiles físicos y experiencia internacional, pero cada opción parece esfumarse cuando llegan las grandes propuestas económicas de fuera de Europa.
La sensación de cierto desánimo se ha instalado entre los aficionados y la plantilla, aunque desde el club insisten en que no se va a bajar la exigencia. El mercado aún está abierto y las oportunidades pueden surgir en los próximos días, especialmente si algunos equipos de Primera deciden liberar jugadores de nivel. El Oviedo tendrá que pelear hasta el final para reforzar una posición clave en su esquema.