El Atlético de Madrid había arrancado la temporada con la ilusión de demostrar que su inversión veraniega tendría resultados inmediatos. El club se reforzó con fichajes millonarios para dar un salto competitivo, pero la primera jornada en Cornellà destapó viejas dudas que siguen persiguiendo al equipo de Simeone.
La derrota contra el Espanyol abrió un debate profundo sobre la vigencia del plan de juego que tantos éxitos otorgó en el pasado. Lo que antes funcionaba como seña de identidad ahora se ha convertido en un recurso cuestionado, especialmente tras la remontada encajada en los minutos finales.
El análisis de Santi Cañizares sobre el estilo del Atlético de Simeone
Santi Cañizares, exguardameta internacional y ahora colaborador habitual en El Partidazo de COPE, fue contundente con su valoración. “La gran diferencia es que antes era capaz de conservar el resultado, juntarse y no permitir que nadie rematara. Esa es la gran diferencia entre el gran Atlético de Madrid y el actual Atlético de Madrid. Ahora esa forma de conservar un partido no funciona y acaba perdiendo”, señaló el exportero en el programa radiofónico.

El exjugador destacó que la derrota resulta todavía más dolorosa por el contexto. “Cuando te echas atrás y pierdes, la derrota es más fea, porque se interpreta como cobarde. Siempre lo ha hecho el Atlético y le había funcionado, lo que pasa es que ahora ya no le sale bien”, concluyó Cañizares.
El Espanyol aprovechó los espacios para culminar la remontada en Cornellà
Los datos refuerzan la crítica hacia el planteamiento de Simeone. En la segunda mitad, el Espanyol remató en seis ocasiones, con tres disparos a portería que pusieron en apuros a Oblak. La insistencia blanquiazul tuvo premio en los minutos finales, cuando Miguel Rubio y Pere Milla dieron la vuelta al marcador para delirio del RCDE Stadium.
El Atlético, en cambio, apenas generó peligro tras su tanto inicial y quedó encerrado en su propio campo. El guion recordaba a las grandes noches de antaño, cuando Simeone se aferraba a la solidez defensiva como principal fortaleza. Sin embargo, aquella fórmula ya no parece infalible y las dudas vuelven a rodear a un vestuario que necesita respuestas inmediatas.
Un plan de partido que ya no garantiza la fiabilidad defensiva
Durante años, el Atlético construyó su identidad alrededor de la resistencia defensiva y la eficacia en transiciones rápidas. Pero la derrota en Cornellà muestra que esa fórmula se ha desgastado con el tiempo. Los rivales ya saben cómo atacar ese repliegue bajo y los rojiblancos han perdido la contundencia en los duelos individuales.
Cañizares puso el foco en esa falta de intensidad que antes marcaba la diferencia. “Todo el mundo que remataba lo hacía herido porque tenía una marca y una persecución. Ahora eso no ocurre”, explicó. Ese análisis conecta directamente con el sentimiento de la afición, que reclama un paso adelante en la propuesta de juego.