Mauricio Pochettino atraviesa un momento diferente en su carrera. Tras dirigir a Tottenham, PSG y Chelsea, el argentino se encuentra centrado en su proyecto como seleccionador de Estados Unidos, con el reto mayúsculo de disputar el Mundial 2026 como anfitrión. Sin embargo, su vínculo con el Espanyol y su visión sobre el Barça siguen generando titulares cada vez que habla.
En una entrevista en El Cafelito de Josep Pedrerol, Pochettino lanzó varias críticas al Barcelona y defendió con firmeza los valores del Espanyol. “Dicen que el Barça es más que un club. ¿Qué quiere decir? ¿Que hay que adoctrinar a los niños en ciertas ideas? Yo creo que el Barcelona se equivoca en eso. Cada equipo tiene su cultura y el Barça es un grandísimo club, pero no comparto lo que quieren vender”, señaló.
El exentrenador perico fue más allá al afirmar que “el Espanyol es un club mucho más independiente y mucho más catalán. Mucho más catalán, que el Barcelona”. Sus palabras han reabierto un debate histórico sobre la identidad de ambos equipos dentro de Catalunya.

La frase que nunca olvida la afición
Pochettino recordó también una declaración que lo acompaña desde hace años. “¿La frase de que me iría a trabajar a mi granja en Argentina antes de entrenar al Barcelona? Sigue siendo buena, ¿no?”. Una vez más, reafirmó que nunca dirigiría al Barça, insistiendo en que su identificación con el Espanyol es total.
El técnico argentino jugó más de 250 partidos con la camiseta blanquiazul -más que ningún otro jugador proveniente de su país- y posteriormente entrenó al equipo entre 2009 y 2012. Esa conexión explica por qué, pese a que su nombre sonó en su día para el banquillo azulgrana, siempre lo descartó.
Otras reflexiones sobre su carrera
Más allá de sus críticas al Barça, Pochettino habló sobre su trayectoria y algunas oportunidades que pasaron de largo. Reconoció que tuvo posibilidades de entrenar al Real Madrid tras la salida de Zidane. Sin embargo, prefirió ser leal a Daniel Levy y cumplir su palabra de seguir en el Tottenham hasta inaugurar el nuevo estadio. “Nunca es tarde si la dicha es buena”, comentó, dejando abierta la puerta a un futuro en el club blanco.
También se refirió a su etapa en París y su relación con Kylian Mbappé. “Fue una época difícil para Kylian porque de niño siempre soñó con jugar en el Madrid. Yo lo sabía porque tenía muy buena relación con él. No era fácil, porque yo era entrenador del PSG, pero veía que sus ojos brillaban por otro club”, confesó.
Fiel al Espanyol, crítico con el Barça
El argentino dejó claro que su visión sobre el Barça no es nueva ni improvisada. Cada vez que se le plantea la posibilidad de entrenar al eterno rival, insiste en su negativa y en su visión crítica del mensaje institucional del FC Barcelona. Con sus palabras, Pochettino refuerza su imagen como uno de los grandes símbolos de la historia moderna del Espanyol y mantiene viva la rivalidad con el Barça, incluso desde su actual cargo en la selección estadounidense.