El Barça está todavía esperando una respuesta definitiva por parte de Nico Williams y su entorno que todavía no se ha producido. El jugador ya ha empezado a entrenar con su equipo en Bilbao pero no ha respondido a la oferta planteada por el conjunto azulgrana, lo que descoloca a la directiva culé. Entonces se han puesto manos a la obra para buscar buenas alternativas y ahí es donde entra el nombre del galo, Kingley Coman, un jugador que ha tenido un año complicado en el Bayern de Munich debido a las lesiones.
Desde Alemania apuntan a que el Bayern estaría abierto a cederlo incluyendo una opción de compra, para así librarse de su sueldo y asumir otros fichajes que el club bávaro tiene en mente. El Barça por su parte, en caso de que Nico no acabe viniendo, lo valoran como un refuerzo de lujo para el extremo que quiere Hansi Flick y que además lo conoce a la perfección.
Coman, un puntal en el Bayern de Hansi Flick
En el Bayern campeón del sextete bajo las órdenes de Hansi Flick, Coman fue uno de esos jugadores claves para conseguir todos los títulos, no solo por el gol en la final de Champions sino por ser ese extremo desequilibrante y con desborde que se salió esa temporada. Flick quiere repetir ese modelo de juego con jugadores de un perfil similar, con Lamine Yamal por derecha y Coman en caso de que venga por izquierda, y así juntar dos jugadores rápidos, verticales y con profundidad.
Su encaje con Hansi Flick en el Barça
Flick busca un 4-2-3-1 con un doble pivote, un mediapunta llegador y con gol y dos extremos verticales y profundos. También quiere recuperar la presión alta, de ahí que jugadores como Dani Olmo hayan llegado y ahora se intente fichar a Nico o a Coman. El jugador galo encajaría perfectamente por izquierda, donde jugó la mayoría de partidos en el Bayern aunque también puede jugar por derecha, en caso de que Lamine necesite algún día descanso.
Es un jugador que se mueve con libertad en todas las zonas de ataque y de esos que gustan en Can Barça, con desborde, verticalidad y llegada a línea de fondo para centrar, algo que beneficiaría seguro a Robert Lewandowski, con quién ya compartió varios años en el Bayern y se entendieron a las mil maravillas.
Coman actualmente tiene contrato hasta junio de 2027 y su elevado sueldo de 17 millones de euros hace que el Bayern le busque una salida, preferiblemente cesión con compra a final de año. En el Barça no quieren pagar porque dudan de sus problemas físicos que viene arrastrando aunque no dudan de su calidad y condiciones.
Lo ven como una buena oportunidad de mercado en una operación que sería posible hasta el 31 de agosto, último día de mercado. El jugador vería con buenos ojos ir a un proyecto grande como el del Barça y volver a trabajar con el entrenador que mejor rendimiento le sacó en toda su carrera.