Claudio Bravo está a punto de cumplir 41 años e, inevitable y naturalmente, su rendimiento ya no es el de antaño. A esa edad, ya no está para cumplir con creces en el arco de un equipo que aspira a pelear por títulos. Y, por eso, el Real Betis se plantea darle salida el próximo verano.
De hecho, el guardameta chileno termina contrato el próximo mes de junio y el Real Betis no pretende ofrecerle una propuesta de renovación. Por eso, los directivos béticos tiene marcada como una de las prioridades del próximo mercado la de buscar un portero que pueda rendir a alto nivel y competir con Rui Silva. Y, ante esta tesitura, uno de los nombres favoritos es el de David De Gea.
El equipo sevillano aspiró primero a Álvaro Valles, pero, sin embargo, el portero de Las Palmas tiene ofertas más suculentas. Por tanto, el Real Betis ya ha descartado su fichaje y va ahora a por David De Gea. Ya lo intentó, de hecho, en el mercado invernal, pero no terminó cerrándose.
Como David De Gea es agente libre, su fichaje no costaría ni un solo euro a los verdiblancos. Así pues, el único tema de debate sería la ficha del arquero madrileño. Evidentemente, no puede aspirar a cobrar la millonada que percibía en el Manchester United, pero tampoco aceptará cualquier peccata minuta.
David De Gea, sin equipo
Formado en las categorías inferiores del Atlético de Madrid, David De Gea llegó al primer equipo en 2009. Dos años después, ya llamó la atención de uno de los grandes clubes del panorama europeo, el Manchester United, que pagó 25 millones por él. Defendió la portería de los red devils durante 12 años.
En Old Trafford conquistó una Premier League, una UEFA Europa League, dos Carabao, una FA Cup y tres Community Shield. Antes, con el Atlético de Madrid, se había proclamado campeón de otra UEFA Europa League y de la Supercopa de Europa. Además, durante varios años se estableció como arquero titular de la selección española, aunque esta aventura no resultó nada exitosa.
Con todo, De Gea terminó contrato con el Manchester United el pasado verano y, desde entonces, no tiene equipo. Está esperando una oferta que le seduzca y que le permita volver a sentirse a gusto en la portería. Por eso, no vería con malos ojos defender la carcasa del Real Betis.