Hombre de traje hablando con un micrófono en la mano sobre un fondo degradado de colores azul y naranja.

Nuevo éxito de Joan Laporta: Se irá del Barça un jugador con un sueldo muy alto

Ya tiene apalabrada su llegada al Atlético de Madrid

En el FC Barcelona, cada verano representa un reto mayúsculo en la planificación deportiva y financiera. El club, obligado a equilibrar las cuentas y a fortalecer el equipo, afronta uno de los mercados más exigentes de los últimos años, donde la gestión de los salarios elevados y la renovación de la plantilla se han convertido en la máxima prioridad. La defensa, concretamente, era el área que más preocupación generaba en la dirección deportiva. No solo por el nivel mostrado sobre el césped, sino por el peso de varios contratos que limitaban los movimientos de Deco y Joan Laporta en los despachos.

Afrontar este rompecabezas ha sido esencial para que el Barça pudiera rearmarse. Las salidas estratégicas, los movimientos en la recámara y las negociaciones con otros clubes han marcado las últimas semanas en Can Barça.

Reestructuración en la defensa: ventas clave y acuerdos rentables

En este contexto, la reciente operación relacionada con la venta de Todibo al West Ham ha aportado un necesario respiro económico. El club azulgrana, tras haber pactado en su momento un 20% sobre la plusvalía de una futura venta con el Niza, recibirá 8 millones de euros. Una inyección que, aunque no es decisiva, sí alivia las restricciones del fair play financiero y facilita nuevas operaciones.

Griezmann y Lenglet en un partido con el Atleti
Griezmann y Lenglet en un partido con el Atleti | RTVE

Sin embargo, el movimiento que más impacto genera en la masa salarial del equipo es la inminente marcha de un jugador que llevaba tiempo en la lista de transferibles. Su salida no solo libera uno de los sueldos más altos de la plantilla, sino que permite al Barça avanzar en la reconfiguración de su defensa para la próxima temporada. Clément Lenglet rescindirá su contrato con el Barça en las próximas horas.

Clément Lenglet, una etapa cerrada en el Camp Nou

Después de cinco temporadas y 160 partidos oficiales, el central francés dice adiós a la disciplina culé. Llegó como una apuesta de futuro tras despuntar en el Sevilla, pero con el paso del tiempo, su protagonismo fue decreciendo, especialmente en la etapa más reciente. Durante la última temporada, Lenglet estuvo cedido en el Atlético de Madrid, donde acumuló 34 partidos y recuperó sensaciones como parte de la rotación defensiva de Diego Simeone.

La decisión de no contar con él por parte de Hansi Flick, unido a su elevado salario, aceleró las negociaciones para una desvinculación definitiva. Desde el club se veía necesario desprenderse de uno de los contratos más altos para poder encarar otras operaciones prioritarias del verano. Además, la rescisión del contrato ha supuesto que todas las partes hayan tenido que ceder en sus pretensiones económicas para cerrar la operación de forma amistosa.

La desvinculación de Lenglet del Barça le abre la puerta a continuar su carrera en el Atlético de Madrid. El club rojiblanco, que buscaba un refuerzo fiable y experimentado para el centro de la defensa, podrá inscribirle como jugador libre, adaptando su salario a los nuevos parámetros del club colchonero. Esta gestión ha sido fundamental para que pueda viajar con la expedición a Estados Unidos y disputar el Mundial de Clubes, uno de los grandes retos del verano para la entidad de Simeone.

El fichaje supone una apuesta por la solidez y la experiencia. En el Metropolitano, Lenglet podrá aportar su salida de balón y su polivalencia para jugar tanto en defensa de cuatro como en línea de tres centrales, una variable táctica que Simeone suele manejar en función del rival y del contexto de cada partido. Su rendimiento, además, permitirá que la plantilla cuente con mayor profundidad en una temporada cargada de competiciones y exigencias.